Tegucigalpa – En medio de la pobreza, los capitalinos se llenan del espíritu de la Navidad y pese a la situación económica y política que atraviesa el país esperan una fiesta navideña y de fin de año con alimentos en la mesa y pasarla en paz y tranquilidad.

Desde hace varios años los capitalinos no gozaban de un clima fresco, tal y como se registraban en los años 60 o 70, la población volvió a sacar sus abrigos y disfrutar de este clima agradable.

Los capitalinos caminan por los mercados para realizar sus compras y llevar a la mesa los platos tradicionales como los nacatamales o cena (carne de cerdo, pollo, ensalada de papas y vegetales), torrejas, que se degustan en estas fiestas.

La Calle 8 de los mercados capitalinos esta lista para atender a sus clientes en estas fiestas.

Asimismo, vemos como otros capitalinos se ven entusiasmados en comprar el árbol, los foquitos y los adornos para su instalación al igual que el tradicional nacimiento, que simboliza a Jesucristo y su madre la Virgen María, acompañados por otros personajes en el pesebre de Belén.

Pese a la situación difícil en la economía del país, el espíritu navideño se apodera de ellos, aunque para muchos es un costo fuerte.

En ese sentido, tanto vendedores como compradores buscan las mejores opciones para hacer sus compras y celebrar el nacimiento del niño Jesús.

Los vendedores piden a los capitalinos retornar a los mercados.

Situación difícil

Proceso Digital se desplazó al mercado Colón en Comayagüela para platicar con los vendedores y clientes, quienes coincidieron que la canasta básica está muy alta y la situación económica muy difícil.

Doña Neptalia Cuadra, una clienta de los mercados,dijo a Proceso Digital que los precios de la canasta básica están altos, los huevos no bajan de 130 y 150 lempiras.

“Esto (costo de huevos) acá en la capital, no digamos en las aldeas y demás municipios donde las personas compran un huevo a 7 lempiras, no se puede la verdad, todo está caro”, arguyó.

Sostuvo que ella prefiere ir a los mercados ya que puede conseguir lo que necesita para alimentar a su familia a un mejor precio.

Agregó que los hondureños están necesitando grandes oportunidades de empleo para que se pueda al menos comprar la canasta básica.

La esperanza de los vendedores es que sus clientes lleguen a realizar las compras con el pagó del aguinaldo.

Población debe de regresar a los mercados

Mientras que Beky Ponce una vendedora de abarrotería indicó a Proceso Digital que la situación del país es difícil y pese a la falta de dinero ellos, en el mercado, están tratando de dar los mejores precios.

“La población debe de regresar a los mercados, sabemos que muchas personas se han retirado de los mismos por asaltos o por miedo, pero acá nosotros los estamos esperando, somos pueblo y damos lo mejor para que los clientes regresen y que mejor si es para estas fiestas de Navidad, acá pueden encontrar todo lo que necesitan para sus preparaciones a los mejores precios”, detalló.

Dijo que espera que todas las familias tengan algo que comer en estas fiestas de Navidad y Año nuevo, no será fácil llevar un plato de comida a la mesa con tanto desempleo que hay en el país, pero esta época nos llama a reflexionar y ser mejores vecinos.

Los vendedores esperan que con el pago de los aguinaldos la población se apersone a los mercados y puedan llevar a su mesa una torreja, un nacatamal o realizar su cena.

A causa de la temporada navideña en la que se demanda mayor consumo, unos 40 productos que conforman la canasta básica reportan un aumento de precio.

40 productos de temporada en alza

A causa de la temporada navideña en la que se demanda mayor consumo, unos 40 productos que conforman la canasta básica reportan un aumento de precio.

El huevo, el ayote y la hoja de tamal se encuentran entre estos productos de demanda estacional o de temporada, explicó Adalid Irías, presidente de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah).

Sólo el cartón de huevos pasó de una nivelación de 95 lempiras a 150 lempiras a causa de la temporada, ejemplificó.

En ese sentido, Proceso Digital en su recorrido por el mercado Colón conoció los precios para la elaboración de cada platillo que se degusta en esta temporada.

Nacatamales

Es así que para la elaboración de los tamales o nacatamales, que son un plato típico hondureño y muy común que se deguste en esta temporada, tiene un costo de alrededor de 500 lempiras para al menos 20 unidades.

La preparación de los tamales es laboriosa, pero su receta es fácil de hacer y su clave está en el sabor.

Para elaborar los tamales se necesita harina de maíz (L.19 libra) o la masa del maíz (L.33 la medida), manteca de cerdo (L.35 libra), hojas de plátano (3 rollos por 20 lempiras), carne de cerdo (L.62 libra) o de pollo (L.35 libra de pechuga) e ingredientes como cebolla (L.25 libra), tomate (L.20 la bolsa), culantro (L.10 el mazo), achote, arroz (L.12 libra), ajo (L.25), pimienta, garbanzos (L.25 lata pequeña), papas (L.18 libra) y sal (L.3 bolsa).

Cena navideña

Asimismo, algunos capitalinos pueden llevar a su mesa una cena navideña tradicional utilizando cerdo, ya sea pierna, lomo o costilla, (arroz o ensalada de papas) y ensalada verde (lechuga, pepino y zanahoria).

En los mercados capitalinos la libra de carne de cerdo se cotiza a 62 lempiras por lo que dependiendo de la cantidad de personas en cada familia se compra la misma.

Igualmente, los precios para la elaboración de una ensalada de papas, cada libra tiene un costo de 18 lempiras, más la mayonesa que la bolsita tiene un costo de 28 lempiras dependiendo la marca al igual que la mostaza.

En cuanto a la ensalada verde la lechuga tiene un costo de 25 lempiras la cabeza, la libra de zanahoria se cotiza a 12 lempiras y cada pepino cuesta 8 lempiras.

En ese sentido, los capitalinos deben de disponer por lo menos de 800 a mil lempiras para la realización de este plato.

Torrejas de miel 

En Honduras, existe un postre tradicional que suele comerse en épocas de Cuaresma, Navidad y Fin de año, y lo mejor es que su preparación es muy fácil y no necesita de muchos ingredientes, la mayoría son de uso común.

En tal razón, el costo para la elaboración de este postre es de 260.00 lempiras.

Para su preparación se utiliza medio cartón de huevos, que su costo es de 75 lempiras, dos bolillos de yema que tiene un costo de 80 lempiras, una rapadura de dulce que se encuentra entre 40 y 45 lempiras, más canela que varía entre los 40 y 60 lempiras la media libra.

Las familias hondureñas por lo menos deben de contar con al menos dos mil lempiras para poder llevar estos tres platillos de la temporada a sus mesas y dependiendo de la cantidad de personas que integren la misma.

Nacimientos y árboles

En nuestro recorrido pasamos por la Calle 8, ubicada entre el Instituto Mixto Hibueras y la esquina donde estaba instalado Caprisa en los mercados de Comayagüela, es una de las más coloridas ya que las luces navideñas, los nacimientos, venaditos y cada uno de los artículos que se utilizan para decorar las viviendas y dar vida a los árboles se encuentran en ese sector de los mercados.

Los vendedores de ese sector se encuentran optimistas y esperan que con el pago de los aguinaldos su situación cambie y los clientes lleguen a realizar sus compras.

Don Carlos Alvarado, uno de los vendedores de la Calle 8 dijo a Proceso Digital que las ventas no han estado mal, pero que esperan que en estas próximas semanas la situación sea mejor.

Alvarado hizo un llamado a la población para que se apersonen a los mercados donde se encuentran los mejores precios.

Al ser consultado sobre el precio de un nacimiento detalló que depende de cómo lo quiera el cliente, si de barro, yeso o de mármol, mismos que varían entre los 350 lempiras a los cuatro mil dependiendo el tamaño y calidad del mismo.

Agregó que los niños (Jesús) varían entre los 500 lempiras a los mil 500 lempiras dependiendo el tamaño.

También dijo que en esa zona se encuentran luces entre los 70 a 200 lempiras, los venaditos el par a 250 lempiras.

Es así como terminamos el recorrido por los mercados, donde los vendedores hacen un llamado a los capitalinos para que hagan sus compras y así ayudarlos a ellos a pasar una buena navidad moviendo su economía. (IR).