La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, fue registrada este miércoles, durante una entrevista con Efe, en el marco de la XIV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, en Santiago de Chile. EFE/Alberto Peña

Santiago de Chile – La incorporación de más mujeres al mercado laboral ayudaría a solucionar el estancamiento económico que vive Latinoamérica, que apenas creció un 0,1 % en 2019, dijo este martes en una entrevista a Efe la secretaria general Iberoamericana (Segib), Rebeca Grynspan.

«Todos los estudios dicen que si hubiera condiciones iguales en salarios y en participación de la población económica activa, los países tendrían hasta un 14 % más de producto interior bruto (PIB) de lo que tienen ahora», aseguró Grynspan.

Para la exvicepresidenta de Costa Rica, «no hay ninguna otra intervención (para solucionar el nulo crecimiento) que dé tanta rentabilidad como incorporar a las mujeres mucho más al mercado laboral».

Según un estudio presentado esta semana por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el número de mujeres sin ingresos propios se redujo hasta el 27,5% en 2018, lo que implica que cerca de un tercio de las mujeres de la región depende totalmente de otros para su subsistencia.

La secretaria Iberoamericana alertó además de que la situación económica de la región puede traducirse en «menores oportunidades de empleos y salarios», especialmente para las mujeres, «que tienden a sufrir mucho más por ello al estar en sectores muy vulnerables o de baja productividad».

«Además, si se retraen los servicios sociales, eso es una recarga sobre las mujeres», agregó Grynspan, que viajó a Santiago de Chile para participar en la XIV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe.

La cita, que se celebra hasta el 31 de enero en el país andino, reúne a gobiernos, organismos internacionales y sociedad civil y está considerada la conferencia más importante de la región en materia de igualdad de género.

La región latinoamericana creció solo un 0,1 % el año pasado, lastrada principalmente por la situación de sus tres grandes economías: México, Brasil y Argentina. Las proyecciones de crecimiento para este año, si bien mejoran con respecto a las cifras de 2019, no son muy prometedoras.

La Cepal estima que el crecimiento en Latinoamérica podría llegar hasta el 1,3 %, mientras que el Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó este miércoles su previsión hasta el 0,9 %, lo que situaría al período 2014-2020 como el de menor crecimiento para la región en las últimas siete décadas.

Para estimular el empoderamiento femenino, la exvicepresidenta costarricense pidió a algunos países de la región derogar leyes «de tutelaje» que prohíben a las mujeres ejercer ciertos empleos por cuestiones de seguridad o suscribir el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que protege los derechos de las trabajadoras domésticas.

«Para 18 millones de mujeres en América Latina su trabajo asalariado es el trabajo doméstico y no tienen igualadas sus condiciones laborales al resto de profesiones y no tienen protección de la ley», apuntó Grynspan, que recordó que casi un 26 % de las trabajadores domésticas viven en hogares en situación de pobreza.

La secretaria lamentó además que actualmente ningún país latinoamericano esté liderado por una mujer -la última en ocupar una jefatura de Estado fue Michelle Bachelet en Chile (2014-2018)-, aunque se sintió esperanzada por las manifestaciones feministas que en los últimos meses han recorrido el continente, sobre todo tras el movimiento «Me Too» o la coreografía «Un violador en tu camino» del grupo chileno «Las Tesis».

«Lo que yo veo es una revitalización del movimiento feminista a través de las mujeres jóvenes. Las mujeres jóvenes han entrado a la discusión y al dialogo de la equidad de genero con mucha más fuerza y eso es lo que a mi llena de esperanza», concluyó.