Ciudad del Vaticano – El papa Francisco aseguró este lunes, durante la Santa Misa por la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, que la Virgen «está en medio de las caravanas que, buscando libertad y bienestar, caminan hacia el norte» del continente americano.
«Ella vino para acompañar al pueblo americano en este camino tan duro de pobreza, explotación y colonialismos socioeconómicos y culturales», dijo en español al pronunciar su homilía en la Basílica de San Pedro, donde se congregaron fieles con banderas de México, El Salvador, Nicaragüa y otros países latinoamericanos.
Acompañado de una imagen de la Virgen de Guadalupe, que se apoyó en una de las columnas del baldaquino diseñado por Gian Lorenzo Bernini, el pontífice argentino sostuvo que «Ella está en medio de ese pueblo americano amenazado en su identidad por un paganismo salvaje y explotador, herido por la predicación activa de un ateísmo práctico y pragmático».
Además, Francisco aseguró estar preocupado por «las propuestas de tinte ideológico-cultural de diverso signo» que tratan de apropiarse del icono, «del encuentro de un pueblo con su Madre».
«Que quieren desmestizar y maquillar a la Madre», insistió.
Y añadió en clave política: «Por favor, no permitamos que el mensaje se destile en pautas mundanas e ideológicas. El mensaje es simple, es tierno: “¿No estoy yo aquí, que soy tu Madre?”. Y a la Madre no se la ideologiza».
Así, el papa aprovechó para recordar la importancia que Guadalupe tiene para el pueblo americano, ya que llegó para «consolar y atender las necesidades de los más pequeños, sin excluir a nadie, para arroparlos como madre solícita con su presencia, su amor y su consuelo».
«Sucedió hace casi cinco siglos, en ese momento complicado y difícil para los habitantes del Nuevo Mundo, el Señor quiso transformar la conmoción que suscitó el encuentro entre dos mundos diversos en recuperación de sentido, en recuperación de dignidad, en apertura al Evangelio… transformarlo en encuentro», recordó.
Las palabras del papa se produjeron el mismo día en que se inicia la Novena Intercontinental Guadalupana, un «novenario» de años para celebrar el 500 aniversario de la aparición de la Virgen de Guadalupe en México, cuya culminación llegará en diciembre de 2031.
Por ello, Francisco «exhortó» a todos los miembros de la Iglesia «que peregrinen a América».