Los Ángeles (EE.UU.) – La ficción de un mundo liderado por simios revive en la nueva película de Wes Ball ‘Kingdom of the Planet of the Apes’ (‘El reino del planta de los simios’), una historia sobre poder y corrupción que se pregunta metafóricamente acerca de una cuestión de urgente actualidad.
“¿Podemos los seres humanos convivir con personas diferentes a nosotros?”, desliza Ball en una entrevista con EFE.
La cinta, que estrena este viernes y está escrita por Josh Friedman, Rick Raffa y Amanda Silver, tiene lugar muchos años después de que se lanzara la última trilogía (2011-2017) de esta franquicia setentera basada en la obra de Pierre Boulle.
En esta nueva versión por 20th Century Fox, los simios han evolucionado al grado de liderar el planeta mientras que los humanos han perdido capacidades cognitivas como el habla y viven cual cavernícolas.
El filme se centra en Noa, un joven primate interpretado por Owen Teague que vive tranquilo en la jungla con su familia y amigos, y cuyo principal interés en la vida es no decepcionar a su padre, el maestro de las aves.
Sus planes se ven interrumpidos con el ataque de otro grupo de simios que secuestra a su comunidad entera para ponerlos a disposición del líder tirano Proximus Caesar.
Éste busca hacerse con las armas de destrucción más potentes creadas por los humanos en el pasado y para ello tergiversa las ideas y mandatos de Caesar, el entrañable protagonista de los filmes previo dirigidos por Rupert Wyatt (2011) y Matt Reeves (2014,2017), que en esta trama ha alcanzado estatus de mito.
“Es un filme histórico y épico. Vemos casi la historia de la especie humana y su marcha a través de la civilización”, ahonda Ball, quien confiesa que se inspiró en “carismáticos” líderes históricos -como el guerrero y conquistador mongol Genghis Kahn- que “retorcieron la verdad para lograr su objetivo manipulando a la gente”.
Durante un tiempo, el cineasta se negó a retomar la dirección de nuevas películas sobre esta franquicia.
“Pensaba que, como yo, mucha gente creía que la última trilogía había sido perfecta. ¿Por qué necesitaríamos otra?”, comenta el también director de ‘The Maze Runner’.
Sin embargo, la posibilidad de explotar al máximo los efectos especiales con una historia que versa sobre “la verdad” o “el poder del conocimiento”, y con un nuevo personaje inspirador que pudiera conectar con el legado de ‘Planet of the Apes’, lo llevaron a aceptar el reto.
Su reflejo en la actualidad
La historia está enfocada principalmente en el conflicto entre simios, pero la presencia humana la encabeza Freya Allen, quien interpreta a Mae, cuyas intenciones son difíciles de adivinar, pues en la existencia de ambas especies se desdibuja la línea entre el bien y el mal.
“En la película, no sabes si deberías confiar en ella o no, es tan misteriosa que no puedes descifrarlo (…) pero creo que son importantes esos momentos en los que Noa y Mae se dan cuenta de lo similares que son”, comenta a EFE Allan.
Desde el punto de vista de Peter Macon, quien da vida a Raka, el sabio primate que predica las ideas de Caesar y aspira a la convivencia pacífica entre simios y humanos, la cinta transmite un mensaje urgente en una actualidad en la que predominan las guerras y los desastres provocado por el calentamiento global.
“Espero que la película sirva como espejo. Como una especie de cuento con moraleja sobre lo que puede pasar si el poder se corrompe, a quién le damos el poder y cómo se distribuye, y que eso nos haga examinar la relación que tenemos con el planeta y con todos los demás”, finaliza Macon.