Tegucigalpa – El empresario Antonio Toledo Valle expuso hoy que la falta de mano de obra es el principal desafío de la caficultura hondureña.
La falta de mano de obra provoca que el grano de café se caiga solo y se eche a perder, comentó.
La falta de mano de obra está estrechamente ligado con la migración irregular. Por un lado los corteros de café han emigrado.
En otro aspecto, hay corteros con familiares que envían remesas y ya no quieren hacer ese trabajo, exteriorizó.
Además existen otros desafíos como la roya, una plaga que provoca pérdidas millonarias en este rubro.
Ejemplificó que él redujo una producción de más de 30 mil quintales por año a 21 mil quintales.
Un aumento de los flujos migratorios durante los últimos meses ha provocado escasez de mano de obra en los campos de varios departamentos de Honduras.
Entre los departamentos con escasez de mano de obra se encuentran los principales cosechadores de café, por lo que la migración tiene un impacto directo en sectores como la caficultura hondureña.
El principal producto de exportación en Centroamérica es el café tostado (17,7 %) y Honduras es el mayor exportador en la región, sin embargo para esta cosecha se prevé una disminución por varios factores como el precio internacional, la falta de mano de obra y el cambio climático.