Autor del artículo: Proceso Digital / por Alejandro García
Tegucigalpa – Los archivos patrimoniales y documentales forman parte de la riqueza documental y representa la memoria y la historia de un país.
-Urge que el Congreso Nacional apruebe el proyecto de la Ley General de Archivos, a fin de que los documentos históricos sean preservados adecuadamente.
-A través del programa Registro de la Memoria del Mundo, la Unesco asesora en la creación de una estrategia para preservar los documentos históricos del país.
Sin embargo, en la actualidad se tiene la percepción de que los patrimonios documentales deben ser guardados en una bodega o cuarto abandonado y almacenados sin ninguna condición adecuada de preservación quedando en estado deplorable, sucio, polvoso y en algunos casos hasta destruido.
Varios expertos en la materia manifestaron a Proceso Digital que no existe una preservación de archivos de manera adecuada en las instituciones y direcciones.
Asimismo, consideraron de “urgencia” la aprobación de una Ley General de Archivos que garantice la seguridad, preservación, protección, cuidado y acceso a los documentos patrimoniales.
“Solo con la Ley General de Archivos podríamos garantizar la seguridad de los documentos, la preservación y su debido proceso de gestión documental”, manifestó el subdirector del Archivo Nacional, Dennis Eduardo Ramírez.
Sin embargo, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), mandó en septiembre un delegado para que asista al país para implementar medidas que preserven el patrimonio documental.
Urge una legislación
El subdirector del Archivo Nacional de Honduras, Dennis Ramírez, expreso que Honduras tiene una riqueza documental e histórica como cartas autógrafas de los próceres Francisco Morazán, José Trinidad Cabañas y Dionisio de Herrera.
Indicó que para tener una preservación adecuada de los documentos patrimoniales, es necesario que el Poder Legislativo apruebe la Ley General de Archivos.
“Se ingresó en 2015, se hicieron algunas reformas y este año se volvió a presentar y lo turnaron a una comisión de dictamen, pero no sabemos a cuál”, acotó.
El funcionario reconoció que en la actualidad la preservación de archivos no sigue una norma por lo que se genera desorden y en algunos casos hasta la destrucción.
“Es raro que las instituciones no cuenten con sus archivos organizados porque existe una percepción que un archivo es sinónimo de bodega”, lamentó Ramírez.
Explicó que los archivos documentales siguen un proceso donde son guardados de manera arbitraria quedando en estado descomposición o de destrucción.
Aseveró que solo cuatro instituciones siguen el debido proceso de preservación y protección: la Secretaría de Justicia, Gobernación y Descentralización, el Poder Judicial, el Archivo Nacional de Honduras y la Policía Nacional, que recién lo inicia.
Archivos municipales maltratados
El subgerente de patrimonio del Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH), Omar Talavera, confirmó que las alcaldías son las peores instituciones en concepto de protección de archivos patrimoniales.
“Cuando uno visita los archivos en las alcaldías municipales estas son bodegas, es un cuarto donde se depositan los archivos”, lamentó.
Añadió que cuando una persona consulta una fuente de investigación busca la primera fuente que son los documentos, pero si estas desaparecen dónde investigará la población.
En ese sentido, recomendó que el cuidado de archivos patrimoniales deba ser protegido por un Consejo Nacional de Archivos que debe de ser presidido por el Archivo Nacional, quien es el ente facultado.
Talavera reveló que otro de los problemas que sufren es la falta de recursos necesarios por parte del Estado que ayude en la protección adecuada de archivos patrimoniales.
Coincidió con la posición del subdirector del Archivo Nacional, Dennis Ramírez, en el sentido que el Congreso Nacional debe aprobar la Ley General de Archivos.
Memoria del Mundo de la Unesco
La Unesco implementa desde 1992 el programa Registro de la Memoria del Mundo destinada a preservar el patrimonio documental del mundo albergado en bibliotecas, archivos y museos como símbolo de la memoria colectiva de la humanidad.
El Registro de la Memoria del Mundo es una lista del patrimonio documental que ha sido aprobado por el comité consultivo internacional y ratificado por el director general de la Unesco como elemento que cumple los criterios de selección del patrimonio documental considerado de importancia mundial.
“Lo que queremos hacer es iniciar en crear una hoja de ruta y un documento estratégico que se enfoque en la preservación patrón documental”, detalló el especialista asociado de Comunicación e Información de la Unesco, Jamion Knight.
Señaló que uno de los pasos es la identificación de las necesidades y retos y de cómo la Unesco puede acompañar a Honduras en la preservación de documentos, a través del uso de las herramientas tecnológicas.
“Hay que pensar en crear políticas públicas y aprobar leyes como Ley del Patrimonio Documental”, afirmó.
El delegado de la Unesco se reunió con IHAH, Archivo Nacional de Honduras, Asociación de Bibliotecarios, Fuerzas Armadas, Poder Judicial, la Dirección Ejecutiva Tecnológica de la UNAH, entre otros, para capacitarlos en preservación de documentos patrimoniales.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Bibliotecarios y Documentalistas de Honduras, Nítida Carranza, manifestó que es importante el programa Memoria del Mundo para el rescate y acceso a la información documental de archivos.
“Buscamos el rescate, organización, protección, cuidado y el acceso a la información documental de archivos y bibliotecas que constituyen un patrimonio documental”, recalcó.
La funcionaria apuntó que la Unesco dio cinco recomendaciones para la preservación y organización de patrimonios documentales que son: la identificación patrimonial, preservación, acceso, medidas de política y la parte de cooperación nacional e internacional.
Destacó la importancia de las aprobaciones de una Ley General de Archivo y Biblioteca que ampararán la protección de la documentación.
“Si no hay una ley que la proteja cualquiera puede hacer uso de la información indebido, perdiendo parte de nuestra historia”, advirtió.
Aclaró que la Ley de Biblioteca se orienta en cómo deben ser tratados los fondos documentales dentro de estos espacios, el acceso, si el estatus del personal es adecuado, así como la infraestructura y la tecnología.
Carranza cuestionó que hay servicio de Internet en los parques, pero no en las bibliotecas donde es un lugar seguro.
Asimismo, lamentó que las personas tengan una percepción que los bibliotecarios son personas que se aburren detrás del anaquel.“Tenemos un concepto erróneo de que cualquier persona puede estar en una biblioteca porque solo da libros a las personas, cuando los bibliotecarios son gestores de la información, diseñadores de servicios y conocedores de la necesidad”, señaló.
Reafirmó que el objetivo de un bibliotecario es que el usuario nunca se vaya sin la información.
Ratificó que las bibliotecas escolares son las que se encuentran en peores condiciones, debido a que hay varias que se encuentran cerradas debido a que los bibliotecarios se encuentran cubriendo plazas de profesor.