Santiago de Chile – Latinoamérica necesita «urgentemente» fortalecer la acción climática en la agricultura para frenar las amenazas que se ciernen sobre la seguridad alimentaria y la biodiversidad, aseguró la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), cuya sede regional se ubica en Chile.

Durante un evento virtual titulado «Diálogo Regional: Cooperación y oportunidades para fortalecer la acción climática en la agricultura de América Latina y el Caribe», el organismo internacional instó a los países de la región a avanzar en «la integración sectorial ambiente-agricultura».

«Necesitamos urgentemente fortalecer la acción climática para hacer frente a los impactos del cambio climático en los sistemas agroalimentarios y que amenazan de forma sustantiva los medios de vida, la seguridad alimentaria y la biodiversidad», dijo el representante regional de la FAO, Mario Lubetkin.

La actividad contó con la participación de la Plataforma de Acción Climática en Agricultura de Latinoamérica y el Caribe (PLACA), con la Alianza por el Suelo de América Latina y el Caribe (ASLAC) y altos representantes de gobiernos y organizaciones de la región.

La ministra del Medio Ambiente de Chile, Maisa Rojas, subrayó que «Chile ha ido ganando una experiencia relevante en la articulación intersectorial entre Medio Ambiente y Agricultura para enfrentar desafíos compartidos, principalmente en relación a la gestión de la biodiversidad y cambio climático».

La cita se realizó en la antesala de la 27ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27), que se celebrará a partir del 7 de noviembre en Egipto.

Entre las iniciativas que están llevando algunos países de la región para fomentar una producción agrícola más sostenible y resiliente, la FAO resaltó un proyecto de gestión sostenible de las pesquerías de arrastre en Brasil, Surinam y Trinidad y Tobago que «permitió reducir en hasta un 36 % la pesca no intencionada gracias a nuevas redes y tecnología».

En Colombia, apuntó el organismo, «mesas técnicas agroclimáticas permitieron que un gremio bananero en Magdalena y La Guajira redujera en un 15 % sus pérdidas por efectos climáticos y un 25 % el uso de fertilizantes por hectárea».

La FAO también destacó «la recarbonización de suelos en Costa Rica» y «la conservación de la biodiversidad y mitigación del cambio climático, con enfoque de género y junto a la comunidad indígena Karizña en la Reserva Forestal Imataca. en Venezuela».