Tegucigalpa – El director de la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (FENAGH), José Chacón, expresó su profunda preocupación por las millonarias pérdidas que enfrenta el sector agropecuario tras el paso de la tormenta Sara.

Según estimaciones de la federación, los daños ascienden a 2,480 millones de lempiras, mientras que las aseguradoras solo cubrirán alrededor de 60 millones de dólares, lo que equivale a menos del 3% del total de las pérdidas.

«Esto evidencia que muy pocos productores tienen aseguradas sus unidades de producción. Además, muchos de los que lograron asegurarlas posiblemente no tendrán otra oportunidad para hacerlo, lo que agrava aún más la crisis del sector», afirmó Chacón.

El líder de FENAGH también señaló que un número significativo de productores quedó excluido de las medidas de alivio anunciadas por la Comisión Nacional de Bancas y Seguros (CNBS). Ahora, el acceso a refinanciamientos depende de las negociaciones que puedan alcanzar con las instituciones bancarias.

«Muchos podrían quedar fuera de estos beneficios. Es fundamental que el 100% de los productores afectados tengan acceso al apoyo necesario para garantizar la recuperación del sector», enfatizó.

Chacón instó a los agricultores y ganaderos a comunicarse con la federación para recibir apoyo en la gestión de acuerdos con la banca u otras instituciones. «Entre menos productores activos tengamos, mayor será nuestra dependencia de las importaciones, lo que encarecerá los productos y afectará la producción nacional y el empleo», alertó.

Perspectiva sombría para 2025

El director de FENAGH advirtió que, si no se toman medidas inmediatas, el próximo año será crítico para el sector agropecuario. «Cada tormenta o fenómeno climático agrava la situación. Es urgente trabajar en estrategias que permitan la recuperación del sector para evitar un mayor impacto en la seguridad alimentaria del país», concluyó.