Washington – El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció este viernes nuevas normas que facilitan el trámite para diferir la deportación de los trabajadores indocumentados que experimentan abusos laborales.
“Hay empleadores inescrupulosos que se aprovechan de la vulnerabilidad de los trabajadores extranjeros y que dañan a todos los trabajadores y colocan en desventaja a las empresas que se atienen a las reglas”, señaló el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en un comunicado.
Los trabajadores que son inmigrantes indocumentados muchas veces son renuentes a denunciar las violaciones de las leyes laborales, o de cooperar en las investigaciones sobre normas laborales porque temen la deportación u otras represalias.
El DHS, que entre otras funciones maneja las agencias ocupadas en la inmigración, ofrece la suspensión de la deportación con criterios de caso por caso a las víctimas que no tienen permiso de trabajo, y esto incrementa la capacidad de las agencias de gobierno para investigar esas violaciones.
Los cambios en los trámites anunciados hoy simplifican el ejercicio de las atribuciones que DHS tiene para otorgar esa protección, según un comunicado de la agencia.
Por su parte, Mary Kay Henry, presidenta de la Unión Internacional de Empleados de Servicios (SEIU), una alianza de gremios con casi dos millones de afiliados, elogió la medida.
“El anuncio de hoy beneficia a nuestros miembros y a todos los trabajadores que luchan por mejores condiciones de trabajo, salarios y el derecho a organizarse en gremios” indicó Henry
La acción diferida es una forma de discreción procesal para diferir la acción de remoción (deportación) contra un no-ciudadano por un cierto período de tiempo.
Si bien la acción diferida no confiere estatus legal ni excusa ningún período pasado o futuro de presencia ilegal, una acción diferida otorgada a un no-ciudadano se considera legalmente presente en Estados Unidos para ciertos fines limitados mientras la acción diferida esté vigente, y le otorga un permiso de trabajo.