Un grupo de migrantes centroamericanos a escasos kilómetros de la frontera entre México con Guatemala. EFE/Juan Manuel Blanco/Archivo

Guatemala – El viceministro de Seguridad del Ministerio del Interior de Guatemala, Luis Enrique Arévalo Girón, aseguró este lunes que hay «beneficios para el país» con el convenio migratorio que se discute con Estados Unidos, aunque negó que ya se haya firmado y que sea acerca de un «tercer país seguro».

Bajo esa figura, Estados Unidos podría enviar a solicitantes de asilo de otros países a Guatemala, algo que también se ha planteado con México y que hasta la fecha ese país ha rechazado.En una conferencia de prensa, Arévalo enfatizó que no se trata de «comprometer al país ni a la población en nada», pues Guatemala «no puede comprometerse a acciones que no puede cumplir», como convertirse en un asilo para migrantes irregulares que quieren llegar a Estados Unidos.

Después de la reunión semanal del Gabinete de Gobierno, Arévalo no ofreció detalles a los medios del convenio, pues dijo que «aún está en discusión» y reiteró que tanto Guatemala como EE.UU. «van a manifestar sus condiciones», las cuales, en este momento «son de consenso», aunque «siguen evaluándose y hoy no podemos hablar de un tercer país seguro».

Recordó que la Corte de Constitucionalidad otorgó la noche del domingo un amparo provisional al ombudsman, Jordán Rodas, a un grupos de excancilleres y al excandidato presidencial Manfredo Marroquín para que Guatemala no sea convertida en un tercer país seguro para migrantes, por lo que «se estará analizando la resolución (del Constitucional) para continuar con este caso».

El viceministro manifestó que aún no se tiene definido el nombre del convenio migratorio con el país norteamericano, que «no está firmado», y que desconocía si la intención del presidente Jimmy Morales, que iba a viajar a Estados Unidos para reunirse con su homólogo Donald Trump, aunque después se canceló, era firmarlo.

La migración irregular está afectando «a todos los países de Centroamérica, especialmente a Guatemala, que se convierte en un embudo», añadió.

Consultado acerca del llamado Plan Gobernanza, que lleva a cabo la Policía Nacional Civil, Arévalo sostuvo que es un operativo «enfocado a contrarrestar la migración irregular», pues «toda persona extranjera que no cumpla con requisitos migratorios, quien no realice su respectivo control para ingresar al país de conformidad con la ley tiene que ser expulsada del país».

Es un plan que se trabaja y se pone en práctica en conjunto con El Salvador y Honduras, derivado de los acuerdos migratorios que ha vigilado el secretario de Seguridad Nacional en funciones estadounidense, Kevin McAleenan.

Hace unas semanas, Trump alcanzó un acuerdo con el Gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para que reforzase su frontera con Guatemala y acogiese a solicitantes de asilo en EE.UU. en proceso de espera.