El Ministerio de Salud guatemalteco informó en la última actualización de datos sobre la COVID-19 que 96.480 personas han contraído la enfermedad, incluidas 3.347 que perdieron la vida, desde que fue divulgado el primer caso el 13 de marzo. EFE/Esteban Biba/Archivo

Guatemala – Guatemala contabilizó este jueves 12 muertes por la COVID-19 y 776 nuevos contagios tras llevar a cabo 5.764 pruebas en las últimas 24 horas, la cifra más alta de test en un día desde que inició la pandemia para el país centroamericano.

El Ministerio de Salud guatemalteco informó en la última actualización de datos sobre la COVID-19 que 96.480 personas han contraído la enfermedad, incluidas 3.347 que perdieron la vida desde que fue divulgado el primer caso el 13 de marzo.

Las 5.764 pruebas realizadas en las últimas 24 horas representan la cifra más alta durante la pandemia. El número de test incluye tanto los procesados en el ámbito público como en el privado.

El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, prometió en reiteradas ocasiones entre mayo y julio que sobrepasarían las 5.000 pruebas diarias para evitar correctamente la expansión del virus. Sin embargo, la barrera de los 5.000 test diarios solo ha sido superado en un par de ocasiones, además de la actual.

Según datos del Ministerio de Salud, la primera prueba para detectar la COVID-19 en Guatemala fue realizada el 13 de febrero, un mes antes del primer caso.

A la fecha han sido procesadas 353.538 en total, lo que coloca a Guatemala en el tercer puesto de dicha categoría en Centroamérica, por debajo de Panamá y Costa Rica, pese a ser la nación con más población del istmo -16 millones de habitantes-.

La mayor cantidad de muertes en un solo día fue el 6 de julio, cuando fallecieron 60 personas, mientras que el máximo número de contagios diarios fue el 3 de julio, con 1.324 positivos.

El primer contagio en Guatemala se registró el 13 de marzo y provocó un confinamiento que se extendió justamente al 27 de julio, cuando se retiraron ciertas medidas, y que terminó definitivamente el 1 de octubre con el final del toque de queda y la apertura de bares, cines, gimnasios y deporte amateur.

Giammattei aseguró esta semana que el país podría estar ingresando en una segunda ola de la enfermedad.

La tasa de letalidad del virus es del 3,5 por ciento y la de mortalidad es de 19,9 por cada 100.000 personas, una décima superior al miércoles, según el Ministerio de Salud.