Tegucigalpa – “Habrá un componente de fuerzas de seguridad”, señaló hoy Katie Tobin, Asistente Especial del Presidente Biden y Directora Senior de Asuntos Transfronterizos en el Consejo de Seguridad Nacional (La Casa Blanca), sobre la campaña que se implementará en la Selva del Darién, frontera entre Colombia y Panamá.

En conferencia de prensa telefónica, en la que participó Proceso Digital, la funcionaria estadounidense recordó que los gobiernos de Estados Unidos, Colombia y Panamá acordaron esta semana abordar la grave crisis migratoria regional con una campaña que durará 60 días.

En ese contexto, el gobierno estadounidense proveerá apoyo, planificación, logística, transporte y compartirá información, señaló Tobin.

La campaña busca luchar contra el narcotráfico y el tráfico de personas y se va a centrar en mejorar el arresto y enjuiciamiento y otras labores para interrumpir el ilícito del contrabando humano, detalló.

El enfoque va a ser en los actores criminales y sabemos que los actores criminales transnacionales son los que han entrado en el negocio de tráfico de personas cobrando miles de dólares por hacer el peligroso viaje a través del Darién utilizando información errónea a través de redes sociales, reflexionó.

En ese contexto, razonó que “habrá un componente de fuerzas de seguridad”, pero evitó hablar de militarización.

“Realmente vamos a perseguir a los actores criminales y vamos a coperfilar una presencia en el corredor, pero gran parte de la planificación aún está por hacer”, apuntó.

“Vemos que un enfoque criminal podría funcionar en otras fronteras internacionales incluyendo el sector de Panamá”, continuó.

Vemos la necesidad de ampliar vías legales para refugiados y otras vías de migración a otros países, insistió.

La selva del Darién es la entrada a Centroamérica desde el sur del continente americano y sirve de paso para miles de migrantes irregulares, por lo que los gobiernos buscan cooperar en el plan de evitar saturar la frontera sur de EEUU.