Tegucigalpa – La ocupación hospitalaria de pacientes graves por el SARS-CoV-2 en Honduras ascendió al 98 %, lo que equivale a solo dos camas disponibles en las salas de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), según estadísticas oficiales.

– El poco acceso a vacunas, el cierre de triajes y la falta de pago a médicos forman en Honduras un “coctel peligroso” que puede detonar en el colapso del sistema de salud pública del país.

En ese orden, Honduras llegó este sábado a un punto crítico de la pandemia con solo dos camas disponibles en las UCI de la red de hospitales públicos del país, revela un informe de la Secretaría de Salud (Sesal).

De acuerdo al último boletín sobre ocupación hospitalaria de la Sesal, las UCI de la red de hospitales públicos del país se encuentran al 98 % de su capacidad de forma general y algunas trabajan hasta el 163 % de su capacidad.

Ese es el caso de la UCI del Hospital Escuela de Tegucigalpa que se encuentra al 163 % de su capacidad con 13 pacientes de ocho que puede atender.

Le sigue en ocupación la UCI del Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula que se encuentra al 158 % de su capacidad con 19 pacientes de 12 que puede atender.

Entre tanto las UCI del Instituto Nacional Cardiopulmonar más conocido como Hospital del Tórax y la del Hospital de Especialidades Pediátricas María se encuentran al 100 % de su capacidad con seis y cinco cupos llenos, respectivamente.

De momento, solo la UCI del Hospital de Generalidades San Felipe de Tegucigalpa cuenta con un solo cupo al atender a cuatro de cinco pacientes que representan una ocupación del 80 %.

Es oportuno mencionar que la red de hospitales públicos de Honduras cuentan con 80 camas UCI de las cuales 78 están actualmente ocupadas, es decir solo se dispone de dos camas UCI, según el informe oficial.

Cifras récord

De acuerdo a la Asociación de la Industria Funeraria de Honduras reportó en los primeros seis meses de 2021 siete mil 628 fallecidos por COVID-19 en el país, más de los registrados en todo el 2020.

Así lo informó el secretario general de la Asociación de la Industria Funeraria de Honduras, Jesús Morán, quien detalló que en junio se registró mil 280 decesos por este virus.

Cabe señalar que la industria funeraria registró en todo 2020 un total de 7 mil 420 fallecimientos por el mortal virus.

“A seis meses de 2021 ya llevamos más de siete mil 628 fallecidos y solo en junio cerramos con mil 280 decesos”, precisó.

Morán señaló que los mayores números de muertes se registran en los departamentos de Cortés, Francisco Morazán, Olancho, Choluteca, Comayagua, La Paz, Yoro y Copán.

“Coctel peligroso”

La falta de camas UCI no es el único problema que afronta el país centroamericano ya que en más de 15 meses de pandemia se suman una serie problemas que juntos forman un “coctel peligroso” que avizora un colapso del sistema de salud público del país.

Desde la llegada de la pandemia, la crisis sanitaria se ha ido agravando en Honduras, país que ha tenido que verse golpeado por más 15 meses, no solo por la agresividad del virus y sus mutaciones, sino también por el poco acceso a los insumos, medicamentos y vacunas.

La crisis sanitaria ha estado marcada por la compra de siete hospitales móviles que deberían estar funcionando para atender la pandemia; así como una serie de líneas de investigación por presunta corrupción y múltiples denuncias de diversos sectores de la sociedad hondureña.

Todos esos sucesos se han convertido en una bomba de tiempo que poco a poco se va detonando, inició con la estafa de los hospitales móviles, el colapso del sistema sanitario, la falta de insumos y vacunas, el cierre de centros de triajes, las variantes y ahora falta de salarios a sanitarios.

EFE/EPA/LAURENT GILLIERON/Archivo

Alerta

Aunque el escenario no es nada alentador para Honduras, la pandemia se encuentra en un momento de mucho peligro no solo para el país centroamericano sino para el mundo entero con la variante Delta que se propaga rápidamente.

Así lo alertó en las últimas horas el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien señaló que la variante delta del coronavirus causante de la COVID-19, ya detectada en 98 países, está causando que la pandemia se encuentre en un momento “muy peligroso”.

Aunque en zonas como Europa la alerta se ha relajado por el descenso de casos, “en países con bajas tasas de vacunación sigue habiendo terribles escenas de hospitales saturados”, señaló Tedros en rueda de prensa, tras afirmar que la variante delta, que primero se detectó en la India, “rápidamente se está haciendo dominante”.

El experto etíope aseguró que en las actuales circunstancias “ningún país está completamente a salvo”, dado que la variante delta, más contagiosa que las anteriormente detectadas, puede seguir mutando, por lo que “se requiere una constante evaluación y un cuidadoso ajuste de las medidas de sanidad pública”.

En estos momentos las medidas sanitarias y sociales de prevención, como la mascarilla, el distanciamiento físico o el rastreo de casos sospechosos, siguen siendo muy importantes, aseguró Tedros.