Tucson (AZ) – Iglesias, albergues y voluntarios de la ciudad de Tucson han unido fuerzas para satisfacer las necesidades de docenas de familias inmigrantes que están siendo liberadas por la Patrulla Fronteriza tras haber cruzado la frontera de Arizona.
Gran parte de los inmigrantes forman parte de los grandes grupos que se han entregado voluntariamente tras el cruce ilegal de la línea fronteriza.
Teresa Cavendish, representante de Servicios Comunitarios Católicos, dijo a Efe que tan solo este fin de semana la Patrulla Fronteriza puso en libertad a un grupo de un poco más de 100 personas, en su mayoría provenientes de Guatemala.
Esperan que en los próximos días más inmigrantes sean liberados no solo en Tucson, sino también en Yuma y Phoenix.
«Estamos viendo familias completas, padres, madres con sus hijos y mujeres embarazadas», dijo Cavendish.
Indicó que en los últimos días docenas de familias han sido puestas en libertad.
En los últimos tres meses la Patrulla Fronteriza Sector Tucson ha reportado el arresto de 1.200 inmigrantes que formaban parte de grupos masivos que se entregan a las autoridades estadounidenses y solicitan asilo político tras cruzar la frontera.
Tras ser procesados por entrada ilegal al país, los inmigrantes están siendo liberados por la Patrulla Fronteriza con monitores electrónicos y con una cita ante un juez de migración para que continúen con su caso.
En Tucson los inmigrantes están siendo recibidos en una iglesia local donde voluntarios rápidamente han respondido llevando comida, agua, ropa, artículos de aseo personal, pañales, leche en polvo y juguetes.
Las familias de inmigrantes tienen diferentes destinos en estados como Nueva York, Texas, Florida y Tennessee.
Otros están siendo llevados al albergue de Casa Alitas, el cual abrió sus puertas hace cuatro años para responder a la crisis creada por la proliferación de familias que cruzan la frontera.
Representantes del albergue dijeron a Efe que actualmente están trabajando con las familias tratando de contactar a sus familiares en los Estados Unidos y ayudándolos a comprar los boletos de autobús para que puedan llegar a su destino final. EFE