Un agente de la patrulla fronteriza estadounidense habla a un grupo de jóvenes migrantes centroamericanos tras ser detenidos en los margenes del Rio Bravo, en la fronteriza Ciudad Juárez (México). EFE/Rey R. Jauregui/Archivo

Tucson (AZ) – Un inmigrante indocumentado de origen mexicano presentó una demanda asegurando haber perdido la vista en uno de sus ojos por una herida sufrida cuando fue arrestado por agentes de la Patrulla Fronteriza y por la falta de atención médica, informó ese lunes a Efe el abogado Ramón Soto, quien representa al inmigrante identificado como Adrián Rivera-Cordero.

“Mi cliente nunca opuso resistencia cuando fue arrestado por la Patrulla Fronteriza. Sin embargo, a pesar de sus quejas y de pedir atención médica, pasaron días antes de que fuera revisado por un especialista”, dijo Soto.

El inmigrante, de 37 años de edad, fue arrestado por agentes de la Patrulla Fronteriza el 16 de abril de 2018 en la frontera de Nuevo México dentro del condado de Doña Ana.

De acuerdo con la demanda por “indiferencia deliberada” presentada ante la Corte Federal en Nuevo México a finales de octubre, el ojo derecho del inmigrante fue lesionado cuando fue forzado a tirarse al piso y después levantarse para ser esposado.

Soto relató que a pesar de que solicitó ayuda médica, esta le fue negada los dos días que estuvo detenido en la estación de la Patrulla Fronteriza de Santa Teresa.

Después fue trasladado la prisión del condado de Otero en Chaparral, un centro de detenciones operado por Management and Training Corporation (MTC) donde también al principio le negaron atención médica y solo le proporcionaron agua salina para que se enjuagara el ojo.

Fue hasta 10 días después de recibir la lesión que fue llevado de emergencia para ser evaluado, y un especialista le diagnosticó hemorragia ocular masiva que requeriría atención médica inmediata si presentaba síntomas en el otro ojo. Esto sucedió dos meses después cuando aún estaba detenido en Otero, pero tuvo que esperar semanas para ver a un médico, cuando finalmente fue revisado le dijeron que su retina se había desprendido y necesitaba cirugía de emergencia.

Después de la operación le prescribieron varios medicamentos, los cuales el inmigrante asegura no le fueron proporcionados a tiempo y que nuevamente su condición empeoró en 2019, cuando requirió otra cirugía de emergencia.

El abogado indicó que Rivera-Cordero, quien ya fue liberado del centro de detenciones, perdió la vista completamente del ojo derecho y de la mitad del izquierdo, y solo puede ver de frente. “Este hombre requiere usar gotas y medicamentos de por vida para tratar de salvar la poca vista que le queda”, dijo.

La demanda civil, que pide una compensación económica aún no determinada, es en contra de la Patrulla Fronteriza, MTC y los agentes Jamie Bautista y Pete Soltero de la Patrulla Fronteriza, así como el agente Sergio Crosby de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), Sergio Crosby.

La demanda se encuentra en sus primeros pasos y los demandados tienen hasta finales de enero para responder a la demanda.