Fotografía manipulada desde su toma cedida hoy, por la Guardia Nacional, donde se observa a un grupo de migrantes centroamericanos interceptados por elementos de la Guardia Nacional, en el estado de Coahuila (México). EFE/Guardia Nacional/SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)

Ciudad de México, 25 ago (EFE News).- Un total de 146 migrantes centroamericanos, 50 de ellos menores de edad, fueron interceptados por miembros de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración (INM) cuando viajaban en dos autobuses de pasajeros en el estado de Coahuila, en el norte de México.

En un comunicado conjunto, las instituciones informaron que entre los migrantes se encontraban personas de Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador.

Según el reporte, las personas fueron rescatadas en la carretera Zacatecas-Saltillo, luego de que las autoridades ubicaran dos autobuses de pasajeros estacionados con los motores encendidos.

Ambos vehículos contaban con material adherido en las aletas laterales disminuyendo la visibilidad, lo cual infringe el reglamento de tránsito.

Tras una revisión, en un primer autobús se localizaron a 80 personas extranjeras, 25 de ellas menores de edad, mientras que en el segundo camión había 66 migrantes, 25 de los cuales eran menores.

Los migrantes fueron traslados a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) en Coahuila, donde se les proporcionó agua y alimentos, mientras esperan asistencia consular para, si es el caso, se garantice el retorno asistido a sus países.

Mientras que los menores migrantes no acompañados y las personas en núcleo familiar fueron canalizados al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en la entidad para su atención y alojamiento.

Las autoridades indicaron que tanto los conductores de los autobuses como cuatro personas más que iban acompañándolos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República en el estado.

La migración aumentó en México desde octubre de 2018, cuando caravanas con miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, comenzaron a ingresar al país para llegar a Estados Unidos.

Con la llegada este año de Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos volvió a aumentar el flujo migratorio desde Centroamérica hacia ese país ante la expectativa de que levantara las restricciones de su antecesor, Donald Trump.

El cruce de indocumentados no deja de crecer y durante el presente año han sido arrestados más de un millón de migrantes a lo largo de la frontera, mientras miles quedan varados en México.

Estados Unidos detuvo el pasado julio en su frontera sur a 212.672 indocumentados, la cifra más alta en 20 años.