
Miami (EE.UU.) – El comandante de la Patrulla Fronteriza Greg Bovino deberá informar diariamente a una jueza federal de Chicago detalles de las detenciones e incidentes que ocurran durante la actual campaña de control migratorio de la Administración Trump con la ‘Operacion Blitz Medio oeste’.
La jueza federal de distrito, Sara Ellis, que ordenó su comparecencia ante el tribunal este martes, también le exigió el cumplimiento estricto de su orden temporal de principios de octubre, que restringe el uso de gas lacrimógeno y otras tácticas controvertidas empleadas por sus agentes en los barrios de la ciudad.
El jefe del sector el centro de la Guardia Fronteriza, que cubre parte del sur de California, en la frontera con México, se ha convertido en el rostro de la campaña que hasta el momento totalizaría unas 3.000 detenciones en el área de Chicago, según sus declaraciones en una entrevista por televisión.
La jueza Ellis explicó a Bovino, punto por punto, su orden de restricción y dijo que lo convocó después de que se le viera lanzando personalmente cartuchos de gas lacrimógeno contra una multitud de manifestantes en el barrio mexicano de La Villita de Chicago el 23 de octubre.
Bovino argumentó que sólo utilizó el gas después de que una multitud enfurecida lanzara objetos a los oficiales y una piedra lo golpeara en la cabeza.
«Mi función no es decirle si puede o no puede hacer cumplir las leyes válidamente aprobadas por el Congreso… mi función es simplemente asegurarme de que, al hacer cumplir esas leyes, usted… actúe de manera coherente con su obligación legal», dijo la magistrada.
La jueza subrayó que, como está segura de que Bovino no ignoraría una orden judicial, la única explicación para lo que ha visto en los videos enviados por quienes lo demandaron por no cumplir la orden, es que su orden simplemente no era lo suficientemente clara. «Así que pensé que sería una muy buena idea revisarla para que estemos de acuerdo», dijo. EFE







