Atenas.- La frontera terrestre entre Grecia y Turquía ha amanecido en relativa calma, después de los intensos forcejeos entre fuerzas de seguridad de ambos países durante el sábado.

En las primeras horas del domingo no ha habido intentos de cruce de la frontera por parte de migrantes y refugiados, ni tampoco lanzamiento de gases lacrimógenos por parte de ambas policías fronterizas, señalan los medios locales presentes en la zona.

Durante el sábado hubo 1.401 intentos de cruzar ilegalmente la frontera y 12 detenciones de personas que lo lograron, según el informe oficial del Gobierno griego publicado esta mañana.

Los detenidos son cinco ciudadanos de Pakistán, un afgano, un senegalés, un gambiano, un ciudadano de Malí, un nigeriano, un iraquí y un turco.

Mientras tanto, según fuentes ministeriales, Grecia está preparando la ampliación de la verja que separa este país de Turquía en la zona del río Evros.

Fuentes del ministerio de Defensa han señalado que los trabajos comenzarán en breve y el plan es instalar unos 40 kilómetros de valla. Actualmente, la verja tiene una extensión de 12,5 kilómetros.

La prolongación se realizará en áreas donde el nivel de Evros es bajo o la tierra está seca, para así evitar que haya intentos de cruce por esas zonas.