La mexicana Brenda López, abogada, politóloga y socióloga, posa para Efe durante su participación en un evento de la comunidad asiática con motivo del año nuevo chino celebrado este 26 de enero en Atlanta, Georgia. EFE/Marcelo Wheelock

Atlanta (GA) – La mexicana Brenda López, la primera mujer latina en ser elegida legisladora estatal en Georgia, quiere volver a ser historia, esta vez como congresista federal, pero para llegar a Washington tendrá por delante un duro reto en las elecciones primarias y el 3 de noviembre próximo.

Tras su victoria en los comicios de 2016, la abogada, politóloga y socióloga latina aspira a un escaño en la Cámara de Representantes de Estados Unidos y compite con otros seis candidatos del Partido Demócrata, que se medirán el próximo 19 de mayo.

Pero López no es extraña a los desafíos y sabe que la clave para ganar es obtener el apoyo de las minorías, no solo de los hispanos sino también de la comunidad asiática y de los jóvenes, en una de las áreas más diversas de Georgia, y luego poder sacar a todos esos votantes a las urnas.

La legisladora de 37 años es un rostro bien conocido en la comunidad latina del estado, especialmente en el Distrito 99 que representa en la Cámara de Representantes de la Asamblea General de Georgia, pues desde muy joven ha estado involucrada en distintas organizaciones que defienden a los hispanos.

López, la menor de seis hermanos, nació en Cuernavaca, en el estado de Morelos, y se mudó a Georgia en 1989, cuando solo tenía cinco años, luego de que su padre se acogiera a la amnistía migratoria de 1986 que promulgó el entonces presidente, Ronald Reagan.

«En Georgia estudié en seis diferentes primarias porque cada año nos cambiábamos de apartamento por su alto costo», recordó la representante estatal en una entrevista con Efe antes de participar el domingo pasado en un evento con motivo del Año Nuevo Chino en el que convivió con la comunidad asiática.

A pesar de los retos que enfrentaba como joven migrante, López se graduó de la secundaria e ingresó a la Universidad Estatal de Georgia, donde estudió Ciencias Políticas y Sociología, y luego a la Universidad Syracuse, en el estado de Nueva York, para cursar la carrera de Derecho.

«Desde que estaba en la ‘prepa’ (high school) hacía mucho servicio comunitario con organizaciones sin fines de lucro, y ahí es donde conocí muchas organizaciones hispanas como GLAHR (Alianza Latina pro Derechos Humanos de Georgia) y GALEO (Asociación de Funcionarios Latinos Elegidos de Georgia), de la cual ahora soy parte de la junta directiva», contó la legisladora.

López dijo que en ese entonces, en sus visitas al Capitolio Estatal, comenzó su lucha contra las leyes antiinmigrantes al abogar en favor de medidas como el «Dream Act» junto con organizaciones y activistas, entre ellos el recién fallecido Teodoro Maus, el más reconocido defensor de los derechos de los inmigrantes en Georgia.

«Había estado muy involucrada en lo que era abogacía, pero nunca se me había ocurrido aspirar a un puesto electoral», reconoció la abogada tras señalar que su interés en la política empezó en 2014 luego de que un amigo la instara a participar como voluntaria en la campañas de Jason Carter, candidato a gobernador de Georgia, y Michelle Nunn, al Senado de EE.UU.

Pero lo que finalmente la motivó a dar el paso fue un encontronazo con el entonces legislador del distrito que hoy representa.

«Tuvimos una muy mala conversación: comenzó a decir una lista de todos los estereotipos negativos de los latinos…, y esa fue la razón personal que a mí me impulsó a aspirar. Igual que no nos podemos quejar cuando no votamos, tampoco nos podemos quejar de los candidatos que tenemos si no nos postulamos para darles la opción las personas”, afirmó.

Así, López se lanzó como candidata e hizo historia al ganar la elección en 2016. Cuatro años más tarde, la demócrata reconoce que enfrenta la elección de su vida en la primaria del Distrito Congresional Séptimo, que incluye partes de los condados de Forsyth y Gwinnett, este último el más diverso de Georgia, y para ello anda tocando las puertas de cada casa de la zona.

«Este distrito es sumamente diverso y es necesario que tengamos una representación de personas que han vivido aquí y que representan ese nuevo Georgia que ya vivimos», declaró la candidata, que se mostró optimista sobre sus posibilidades de ganar los comicios pese a que la zona ha sido un bastión republicano desde hace 25 años.

«Por los cambios demográficos, este distrito está listo para un demócrata», agregó la aspirante al Congreso que se convertiría en la primera hispana en representar a Georgia en la Cámara de Representantes de EE.UU.

De ganar, López dijo que entre sus prioridades en el Congreso estarían la reforma migratoria y la educación.