Tegucigalpa – La directora de Casa Alianza Honduras, Cándida Sauceda, en el marco de la celebración del Día del Niño, se pronunció sobre la crítica situación que enfrentan los niños y niñas en el país, señalando que este debería ser un día de celebración por los avances en la protección de la infancia, pero lamentablemente la realidad es sombría.

«En Casa Alianza, con 37 años dedicados a la defensa y protección de los derechos de la niñez, vemos con gran preocupación cómo en Honduras los niños están siendo afectados de diversas maneras. El trabajo infantil ha alcanzado niveles alarmantes, especialmente en las ciudades. Los menores, en lugar de estudiar y prepararse, están asumiendo responsabilidades de adultos para sostener a sus familias», lamentó Sauceda.

Además del trabajo infantil, Sauceda señaló que muchos niños y niñas se ven obligados a tomar la ruta migratoria, exponiéndose a peligros como la explotación sexual y la trata de personas. «Somos testigos de cómo nuestros niños viven en extrema pobreza, vulnerables al reclutamiento por el crimen organizado. Es una situación lamentable, de desprotección absoluta», expresó la directora.

Según los datos presentados por Sauceda, más de 1.6 millones de niños están trabajando en Honduras, una cifra que calificó de alarmante. Y lo más lamentable es que “cada tres horas, un niño pierde la vida en nuestro país. Esta situación debería ser un llamado de atención para las autoridades», enfatizó.

No obstante, Sauceda reconoció que se han logrado algunos avances en la protección de los derechos de la niñez, gracias a la coordinación entre organizaciones de la sociedad civil, la Secretaría Nacional de la Niñez y la Familia (SENAF) y otros organismos del Estado. «Se han establecido políticas como la de Primera Infancia, que busca garantizar los derechos de los niños, pero el problema radica en la falta de presupuesto para implementar proyectos que realmente puedan hacer la diferencia».

Finalmente, la directora de Casa Alianza hizo un llamado a las autoridades para que redoblen los esfuerzos y asignen los recursos necesarios para combatir la vulneración de derechos de la niñez en Honduras, al tiempo que destacó que esta problemática debe ser una prioridad nacional.