Tegucigalpa – Honduras debe profundizar en las causas de la migración irregular de menores de edad no acompañados hacia Estados Unidos para conocer la magnitud del fenómeno y plantear soluciones, dijo este lunes a Efe el coordinador de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en el país, Roberto Canizales.
«Hace muchísima falta poder profundizar sobre las causas por las que la migración de niños ha incrementado en los últimos años», subrayó Canizales.
Un creciente número de menores de edad no acompañados, principalmente de niñas y adolescentes centroamericanas, han llegado en las últimas semanas a la frontera entre México y Estados Unidos, según fuentes oficiales.
Para Canizales, la reunificación familiar en Estados Unidos y la inseguridad que sufren en su país, son las principales causas de la migración de menores.
Añadió que profundizar en las razones por las que los menores migran permitirá a las autoridades de Honduras conocer la magnitud del problema y «plantear soluciones».
«Hay que (buscar) cómo generar arraigo en la niñez», subrayó el experto de la OIM, quien lamentó que muchos menores abandonan sus estudios para migrar ilegalmente.
En Honduras hay una deserción escolar «muy significativa», lo que interrumpe «el desarrollo integral de los niños y adolescentes, así como las posibilidades de optar a oportunidades», enfatizó.
«La educación es un factor de arraigo para la niñez, porque en la escuela ven una red de apoyo en sus maestros y compañeros», señaló Canizales.
Destacó además el vínculo entre la migración y la inseguridad alimentaria en el Corredor Seco de Honduras, país donde más del 65 % de los 9,5 millones de sus habitantes son pobres, debido «a la escasa capacidad» de las familias para garantizar la producción de subsistencia.
Riesgos y peligros en la ruta migratoria
El funcionario de la OIM alertó de los peligros que hay al intentar cruzar, desde Centroamérica, todo el territorio de México hasta la frontera de ese país con Estados Unidos.
«Hay muchos riesgos asociados a la presencia del crimen organizado en la ruta migratoria, más los temas de salud ahora que estamos con el tema de la pandemia de covid-19», agregó.
Indicó que la migración irregular de menores no acompañados tiene «un impacto muy fuerte a nivel social».
«Preocupa el nivel de riesgos y peligros que la ruta migratoria plantea y evidentemente no quisiéramos que los niños y niñas se vean expuestos a delitos vinculados a la migración irregular», subrayó.
Los menores tienen el derecho a emigrar de «manera segura, ordenada y digna», afirmó el experto de la Organización Internacional para las Migraciones.
Los migrantes se exponen a «varias formas de violencia, como física, sexual y represión por parte de autoridades, siendo la violencia sexual un peligro constante para niños, niñas y adolescentes, y mujeres», señaló la OIM en el estudio «Perfil Migratorio de Honduras».
Muchos de los migrantes, especialmente los menores, son «víctimas de explotación infantil, redes de trata de personas, explotación sexual, extorsión y secuestro», señala el mismo documento de la OIM presentado la semana pasada en Tegucigalpa.
Invertir en desarrollo
El especialista de la OIM abogó porque en el Presupuesto de Ingresos y Egresos del Gobierno hondureño se apueste más por el desarrollo y la niñez para frenar la migración, y abordar las causas del problema con un enfoque integral.
«Hay que invertir en el desarrollo, identificar las causas por las que están emigrando y poder abordarlas con un enfoque psicosocial, abordar a las familias y las comunidades», explicó.
En el contexto de la pandemia de la COVID-19, el aumento del número de menores migrantes no acompañados colapsó el sistema de acogida de Estados Unidos, generando fuertes críticas a la Administración de Joe Biden.
La llegada al Gobierno de Biden abrió la esperanza para miles de migrantes que creyeron que sería más fácil llegar a Estados Unidos, lo que ha resultado en un crecimiento del flujo migratorio, según organismos nacionales e internacionales.
