Sarajevo – La ONU alertó este martes de una potencial nueva crisis humanitaria de miles de refugiados sin alojamiento que acampan al aire libre en Bosnia-Herzegovina, en plena temporada fría y en medio de la segunda oleada de la pandemia de la covid-19.
En un comunicado, la oficina de la ONU en el país balcánico instó a las autoridades a emprender «una rápida acción para solucionar esas necesidades de forma urgente».
Los migrantes «están expuestos a las bajas temperaturas y el mal tiempo, sin acceso a los servicios elementales», indicó.
También resalta los riesgos de contagio con la covid-19.
«La ONU está profundamente preocupada por otra nueva potencial situación humanitaria que se desarrolla en algunas partes del país por falta de opciones de refugio para varios miles de migrantes, refugiados y solicitantes de asilo», señala el comunicado.
Pide aprobar «sin demora una estrategia global y un plan dirigido a mejorar y proteger los derechos humanos de las personas en movimiento, incluido el mínimo esencial de los estándares de salud, alojamiento, protección social y educación».
Varios miles de refugiados se encuentran a cielo abierto y en edificios abandonados en la zona de Bihac, en el noroeste bosnio, junto a la frontera con Croacia, por donde tratan de pasar a la Unión Europea (UE).
En Bosnia-Herzegovina se han repetido con frecuencia situaciones de crisis con miles de refugiados fuera de los centros de acogida.
Ahora, en esos centros hay unos 7.000 refugiados de Afganistán, Pakistán, Bangladesh y otros países.
A comienzos de octubre pasado, la ONU, la Unión Europea y varias organizaciones no gubernamentales criticaron el cierre del centro de acogida de Bira, en Bihac, sin que hasta ahora se haya equipado del todo la nueva y cercana instalación de Lipa, ni proporcionado otro alojamiento.