Miami – La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) instó este viernes a las autoridades de Honduras a considerar la «actividad periodística» entre las causas de la muerte de Ricardo Ávila, el camarógrafo fallecido de un tiro en la cabeza el pasado domingo, aparentemente producto de un robo.
Ávila, de 25 años y quien trabajaba como periodista y camarógrafo en el canal y radio Metro, de la ciudad de Choluteca, en Honduras, fue atacado el pasado 26 de mayo por sujetos que le dispararon en la cabeza mientras circulaba en su motocicleta rumbo a su trabajo.
En un comunicado, el presidente de la SIP, Jorge Canahuati, pidió «profundizar las investigaciones y no descartar su oficio como causa del atentado».
Canahuati igualmente llamó a «tomar en cuenta todas las líneas de investigación con el propósito de esclarecer el crimen en su totalidad».
La organización hemisférica, con sede en Miami (EEUU), apunta que, aunque la policía maneja la hipótesis del intento de robo, también «se debe investigar la cobertura que realizaba Ávila de hechos policiales y movimientos sociales».
La organización local Comité por la Libertad de Expresión (C-Libre), citada por la SIP, destacó que en el pasado denunció las frecuentes amenazas que recibía el personal de Metro por su política editorial.
C-libre agregó que el periodista asesinado llevaba «una considerable suma de dinero, así como otros objetos de valor que no le fueron robados», recoge el comunicado de la SIP.
«Es política de nuestra organización atender y exigir justicia por hechos de violencia contra periodistas, incluso en casos en los que existe duda sobre si estuvo relacionado con su trabajo», expresó por su parte Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP.
«En ese sentido, las autoridades deben investigar con prontitud y profundidad para sancionar a los responsables y conocer la verdad», agregó Jornet.
Ávila, quien también dirigía el programa Metro TV Noticias Fin de Semana, fue ingresado el 26 de mayo en el Hospital Escuela, de Tegucigalpa, donde murió tres días más tarde por la herida de bala en la cabeza, sin orificio de salida, dijo a periodistas una fuente oficial del nosocomio.
La fuente agregó que Ávila llegó inconsciente al hospital, en un estado muy grave de salud.
Entre otras complicaciones, el comunicador hondureño sufrió un edema cerebral generalizado, según el informe oficial del Hospital Escuela.
Los asaltantes que agredieron a Ávila le dispararon a la cabeza y una bala le atravesó el casco que llevaba puesto, informaron medios locales de prensa el día del crimen.
De acuerdo a estadísticas de la SIP, este año fue asesinado en Honduras Pablo Isabel Hernández Rivera, director y periodista de la radio comunitaria Tenán 94.1 F.M, «La Voz Indígena Lenca», en el municipio de San Marcos de Caiquín, departamento de Lempira, el 9 de enero.