Washington – La tasa de desempleo en Estados Unidos bajó una décima en enero y se situó en el 3,4 %, según datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés).
En el primer mes del año se crearon 517.000 puestos de trabajo, 294.000 más que durante diciembre, en un momento en el que se observan de cerca los posibles efectos sobre el mercado laboral de las subidas de tipos de interés que ha llevado a cabo la Reserva Federal.
Una cifra que está muy por encima de las expectativas, que sobrepasa el promedio de creación de empleo en 2022 (401.000 nuevos puestos) y que deja el número de desempleados en los 5,7 millones.
Con la bajada de enero son cuatro los meses consecutivos de caída en la tasa de desempleo.
El crecimiento del empleo fue generalizado en enero y estuvo liderado por ganancias en ocio y hospitalidad, servicios profesionales y comerciales, y atención médica. El empleo también aumentó en el gobierno, reflejando parcialmente el regreso de los trabajadores de una huelga, señaló la BLS.
El pasado miércoles la Reserva Federal anunció su octava subida consecutiva de los tipos de interés para controlar los precios. Ahora se sitúan en una horquilla de entre el 4,5 y el 4,75%, el dato más alto en dieciséis años.
La subida fue de 0,25 puntos, una cifra menor que las anteriores, aunque la Fed insistió en que todavía no es momento de parar, por lo que se espera que un periodo continuado de tasas de interés elevadas deje consecuencias en el mercado laboral estadounidense.
Los últimos datos oficiales muestran que los precios se están moderando y la inflación de Estados Unidos volvió a bajar en diciembre, por sexto mes consecutivo, situando su tasa interanual en el 6,5 %, seis décimas menos que un mes antes.