Washington – La tasa de desempleo en Estados Unidos subió dos décimas en febrero a un 3,9 % con respecto al mes anterior, según datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés).
La creación neta de nuevos puestos de trabajo en febrero resultó en 275.000 empleos, en comparación con 229.000 en enero, por encima de lo esperado por los analistas, lo que vuelve a demostrar la fortaleza del mercado de trabajo estadounidense pese a las dudas sobre la economía.
La cifra es superior a los 198.000 empleos que esperaban los economistas, y está por encima del promedio de los 230.000 nuevos empleos en los 12 meses previos.
El sector privado añadió 223.000 empleos y otros 52.000 puestos de trabajo los aportó el sector gubernamental.
Los mayores incrementos del empleo ocurrieron en el cuidado de la salud con 67.000 nuevos puestos en febrero, mientras que los hoteles, restaurantes y bares agregaron 42.000 empleos y la asistencia social añadió 24.000 empleos.
El mes cerró con 6,5 millones de personas desempleadas, un aumento de 334.000. Un año antes la tasa de desempleo era del 3,6 % y el número de desempleados estaba en 6 millones, detalló BLS.
La tasa de desempleo entre los hombres bajó del 3,6 % en enero al 3,5 % en febrero, y la de las mujeres subió del 3,2 % al 3,5 %, indicó el informe.
El desempleo entre los trabajadores blancos se mantuvo en el 3,4 % sin cambios desde enero, en tanto que entre los afroamericanos subió del 5,3 % al 5,6 %, y entre los hispanos se mantuvo en el 5 % de esta fuerza laboral.
En febrero los salarios promedio de los trabajadores subieron cinco centavos a 34,57 dólares por hora después de un aumento de 18 centavos en enero.
Las remuneraciones promedio por hora subieron un 0,1 % en febrero y han subido un 4,3 % en los 12 meses hasta febrero, indicó BLS.
El informe se publica un día después de que el presidente Joe Biden, en su mensaje anual sobre el Estado de la Unión, dijera al Congreso que la economía de Estados Unidos se ha recuperado rápidamente después de temores sobre una recesión y tras la pandemia.
El índice de precios de consumo fue en enero un 3,1 % más alto que un año antes, con incremento del 2,6 % en los precios de los alimentos y una disminución del 4,6 % en los precios de la gasolina, de acuerdo con datos de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Aunque la Reserva Federal mantiene las tasas de interés entre el 5,25 % y el 5,5 %, el nivel más alto desde 2001, el desempeño de la economía ha sido robusto pese a la persistente inflación y las encuestas que muestran el descontento de los ciudadanos con el aumento del costo de vida.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en una presentación ante el Comité de Bancos del Senado dijo esta semana que «la economía crece a un ritmo saludable, sostenible, sólido y fuerte».