Quito – Un consorcio de varias organizaciones lanzó este viernes «SER inclusión», un proyecto que busca mejorar las condiciones de vida de los migrantes venezolanos en Ecuador, así como a la población de acogida, mediante mecanismos de inclusión económica y social.

Los beneficiarios de «SER (salud, empleo, recuperación) inclusión» serán personas que habitan en las provincias de El Oro (Machala, Huaquillas), Esmeraldas (Esmeraldas y San Lorenzo), así como Pichincha (Quito).

La directora del proyecto, Aracelly Calderón, indicó que este durará dos años y busca beneficiar al 70 % de los migrantes venezolanos en situación de vulnerabilidad y pobreza extrema, así como al 30 % de la población de acogida.

En el proyecto están involucrados la Fundación Esquel, la organización HIAS, y Mega Mujeres, y es financiado por el Fondo Italo-ecuatoriano para el Desarrollo Sostenible (FIEDS).

Pretende mejorar el acceso a servicio de salud para los migrantes venezolanos a través de una propuesta de política pública y la formulación de protocolos en Quito y Machala, así como de la aplicación de un modelo de atención en salud mental y una sensibilización a la ciudadanía en las cinco ciudades mencionadas.

«SER inclusión» también aspira mejorar la inclusión económica y social a través de un modelo de inclusión económica y de relacionamiento comunitario.

La directora de HIAS Ecuador, Maricela Parra, recordó que la pandemia de la COVID-19 ha puesto en una situación especialmente difícil a las personas en movilidad humana, por lo que la iniciativa busca generar oportunidades de desarrollo que beneficien a todos «sin dejar a nadie atrás».

El coodirector italiano del FIEDS, Pietro Graziani, indicó que en la convocatoria de 2019, el Fondo ha financiado 13 proyectos por un monto que supera los 10 millones de dólares y que en la actualidad se desarrollan cuatro proyectos a nivel nacional a los que se destinaron 2.4 millones de dólares.

La iniciativa presentada en Quito, «tiene el fin de mejorar las condiciones de vida y la integración social y económica de las poblaciones en movilidad humana y de las poblaciones de acogida en las poblaciones de frontera norte, en la frontera sur y en Pichincha», con especial foco en madres y niños, refirió.

Según datos oficiales en Ecuador residen alrededor de 450,000 migrantes venezolanos, una parte de los cuales se acogió al programa de regularización del anterior Gobierno entre 2019 y 2020, aunque la mayoría sigue sin disponer de la documentación requerida por las autoridades, lo cual dificulta su inclusión en la sociedad.