Una campesina ataviada con gorra, sombrero y pañuelo de tela cubriéndole la boca y nariz trabaja en un campo de cultivo de cilantro en Oxnard, California. EFE/Iván Mejía/Archivo

Washington – Los trabajadores latinos en las plantas procesadoras de alimentos, fábricas y la agricultura han sufrido un impacto la pandemia de la COVID-19 mayor que cualquier otro grupo étnico o racial, según un nuevo estudio de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

«Nuestro estudio sustenta las conclusiones de informes anteriores en el sentido de que el impacto desproporcionado de la COVID-19 en ciertos grupos de minorías raciales y étnicas está vinculado, probablemente, con el riesgo de su trabajo», indicó el equipo investigador.

Aunque los latinos son solo el 37 % de la fuerza laboral en las plantas procesadoras de carne y sitios de trabajo similares en todo el país, 73 % de ellos han tenido un diagnóstico de infección por el coronavirus, según el informe.

«Los sitios de trabajo con alta densidad de personal pueden causar riesgos altos de transmisión del síndrome respiratorio agudo debido al coronavirus, el virus que causa la COVID-19», señala el artículo publicado en la revista Emerging Infectious Diseases de los CDC.

«Las plantas de procesamiento de alimentos, las que manufacturan alimentos y los sitios de trabajo agrícola emplean 3,6 millones de personas. Varios factores contribuyen al contagio en los sitios de trabajo y en la comunidad, incluido el contacto cercano y prolongado con otros trabajadores, la vivienda, el transporte compartido y el contacto comunitario frecuente entre los trabajadores», abundó.

Entre la población general, según los CDC, las personas que se identifican como latinas son cuatro veces más propensas que las blancas a requerir hospitalización por COVID-19.

Los latinos conforman una porción significativa de los que han sido denominados «trabajadores esenciales» -cuya labor no se ha interrumpido debido a la pandemia-, y a la vez son uno de los segmentos de la población que más carecen de seguro médico y acceso al cuidado de la salud, y viven en condiciones de hacinamiento.

Los CDC examinaron la información recolectada entre departamentos de salud de los estados acerca de casos confirmados de COVID-19 en la industria alimentaria, plantas fabriles y la agricultura entre el 1 de marzo y el 31 de mayo.

Casi 73 % de las personas con diagnóstico de infección por coronavirus eran latinos, 6,3 % eran afroamericanos y el 4,1 % eran asiáticos, según el informe divulgado esta semana.

«Esto indica que «los trabajadores hispanos o latinos, afroamericanos y asiáticos en esos sitios de trabajo pueden ser afectados desproporcionadamente por la COVID-19», señalaron los investigadores.