Roma – Los 105 migrantes, entre ellos ocho menores, rescatados por el buque de rescate español Aita Mari esperan desde hace cuatro días en el mar Mediterráneo a que algún país europeo les autorice un puerto en el que poder desembarcar.

«Cuarto día en el que 105 personas a bordo de Aita Mari, entre ellas enfermas y 8 menores, siguen sin tener ninguna respuesta de los gobiernos para desembarcar. Lamentable», explicó el barco en las redes sociales.

De forma paralela, los 406 migrantes socorridos por el barco Sea Watch 3, de la homónima ONG alemana, ya se encuentran en el puerto siciliano de Pozzallo y esperan poder desembarcar en las próximas horas.

«Después de una noche difícil, Sea Watch 3 finalmente ha llegado a Pozzallo. Las 406 personas a bordo están exhaustas y afectadas aún más por la tormenta, las olas y el mareo que tuvieron que soportar en las últimas horas. Estamos esperando que finalmente desembarquen», afirmó la ONG en las redes sociales.

El barco realizó entre el 17 y el 18 de octubre siete operaciones de rescate, salvando a 412 migrantes, de los que 150 eran menores y niños, y uno de ellos un bebe de tan sólo una semana.

La Guardia Costera italiana evacuó en los últimos días a seis mujeres, entre ellas una embarazada y a otras con graves quemaduras por carburante, tras las peticiones de la organización.

Según la OIM, más de 1,400 personas se han ahogado en el Mediterráneo este año, aunque hay que asumir un elevado número de casos no denunciados y más de 25,000 personas han sido devueltas a Libia.