Madrid – De todos los torneos de categoría 1.000 del circuito femenino, el de Madrid destaca por ser el que pierde a más cabezas de serie en las primeras rondas: dieciocho jugadoras que no tenían la condición de favoritas han alcanzado alguna vez las semifinales en la capital española.
La edición de este 2022 no ha escapado de esa tendencia, con dos tenistas, la suiza Jil Teichmann y la rusa Ekaterina Alexandrova, procedente además de la fase previa, en el penúltimo escalón del cuadro.
Las otras dos semifinalistas sí salieron de la lista de cabezas de serie, aunque de la parte baja: la tunecina Ons Jabeur, octava, y la estadounidense Jessica Pegula, duodécima.
Solo entre las diez primeras, la favorita número uno, la polaca Iga Swiatek, se retiró en la víspera de la competición por lesión; en primera ronda cayeron la número 3 y defensora del título, la bielorrusa Aryna Sabalenka; la cinco, la checa Karolina Pliskova; y la diez, la letona Jelena Ostapenko; en segunda ronda perdieron las española Paula Badosa, segunda cabeza de serie, y Garbiñe Muguruza, séptima, y la estadounidense Danielle Collins, sexta; y en octavos de final perdió la británica Emma Raducanu, novena.
La altura de Madrid suele ser el argumento esgrimido por las jugadoras para encontrarse en la Caja Mágica unas condiciones muy distintas a las de otros torneos de tierra.
«Sí, he notado en los entrenamientos que las pelotas se mueven más rápido que en otros sitios. En cierto modo es bueno, pero al mismo tiempo necesito controlar eso, porque a veces siento que mis golpes vuelan», afirmó la canadiense Bianca Andreescu.
«Es cuestión de acostumbrarse», añadió,… siempre que no te eliminen antes.
Las beneficiadas son, por el contrario, las grandes sacadoras.
«Las condiciones son buenas para mí», admitió Teichmann. «Aquí, con la altitud, mi saque se hace grande. Consigo muchos puntos gratis y también meto la primera bola con más facilidad que en la clásica tierra batida. Obviamente, sabía que las condiciones, con mi fuerte efecto, serían muy buenas aquí».
En la historia del torneo de Madrid han sido semifinalistas jugadoras que estaban en el puesto 130 del mundo, como la estadounidense Louisa Chirico en 2016, en el 105, como la checa Lucie Hradecka en 2012, o en el 62, como la española Paula Badosa en 2021.
Alexandrova, semifinalista en esta edición de 2022, ocupa el puesto 45.
Por detrás del torneo de Madrid, los menos positivos para las cabezas de serie son los de Montreal/Toronto, Cincinnati y Roma.