Denver (CO) – Decenas de dirigentes religiosos y de varias organizaciones de Colorado marcharon este domingo en Denver a favor de Araceli Velásquez, una madre salvadoreña que permanece en «santuario» desde hace casi 20 meses para no ser deportada.
La marcha, llamada Procesión por la Libertad, partió desde la Iglesia Metodista Unida de Park Hill (que comparte instalaciones con la sinagoga Templo Micah), donde Velásquez y su familia ingresaron el 19 de agosto de 2017.
«He sufrido mucho en mi corta vida. Solo añoro la seguridad y la paz para mí, para mis hijos y para aquellos que huyen de la violencia en todo el mundo», dijo Velásquez en declaraciones enviadas a Efe a través de la Coalición Santuario de Metro Denver.
La salvadoreña, madre de tres hijos de 6, 4 y 2 años de edad, pidió que se reabra su caso y que las autoridades federales de inmigración «muestren clemencia» para que ella pueda «regresar a mi papel de esposa y madre».
«Poder llevar a mis hijos, Jorge y Christopher, a la escuela y ver sus aulas por primera vez, y disfrutar de la biblioteca y del parque con ellos», agregó la mujer, que ingresó a Estados Unidos en 2010 como indocumentada huyendo de la violencia de su país.
La joven madre presentó en su momento un pedido de asilo que fue rechazado y se emitió una orden de deportación que varias veces fue postergada, hasta agosto de 2017.
La familia buscó santuario en la Iglesia Metodista, que había remodelado parte de su edificio con ese propósito, luego de que agentes federales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) fueran a la casa de Velásquez para arrestarla, sin encontrarla, en un hecho que la coalición calificó de «intimidatorio».
«Oramos para que Araceli reciba la liberación de los confines de la separación familiar y del temor por su vida, para que pueda disfrutar de la preciosa libertad de estar en su propia casa con su amada familia», expresó el rabino Adam Morris del Templo Micah.
Los manifestantes pidieron la cancelación de la deportación de Velásquez y la intervención de la congresista demócrata Diana DeGette a favor de la salvadoreña, quien ya en diciembre de 2017 le entregó a la legisladora una petición similar.
Otras tres mujeres están en santuario en Colorado: Rosa Sabido (mexicana, en Mancos), Jeanette Vizguerra (mexicana, en Denver) e Ingrid Encalada Latorre (peruana, en Boulder.)