México – Más de 9.000 migrantes centroamericanos divididos en varias caravanas se desplazan a través de México rumbo a Estados Unidos, un mes después de que este éxodo masivo se iniciara en Honduras.
El contingente principal de la primera caravana, que partió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) e ingresó al territorio mexicano el 19 del mismo mes, se encuentra en el Auditorio «Benito Juárez» del área metropolitana de Guadalajara, estado occidental de Jalisco.
Pernoctaron en ese sitio más de 4.000 personas con la intención de partir este martes al estado de Nayarit, hacia el norte, siguiendo la ruta del Pacífico rumbo a la ciudad fronteriza de Tijuana.
Una avanzada, formada por un centenar de miembros de la comunidad de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales (LGBT), ya está en Tijuana y planea solicitar asilo a las autoridades estadounidenses en los próximos días.
En tanto, unos 1.200 migrantes de una segunda caravana, también integrada principalmente por hondureños, amanecieron en el complejo deportivo de la Magdalena Mixhuca de Ciudad de México, sitio que también albergó al primer contingente.
En este albergue, autoridades locales y organizaciones civiles brindan atención a los viajeros.
Otros 2.000 migrantes, procedentes en su mayoría de El Salvador, partieron la víspera de Sayula, estado oriental de Veracruz, hacia San Juan de los Lagos, Puebla (centro).
Una cuarta caravana, también de salvadoreños, está dividida entre los estados de Oaxaca y Veracruz.
En un mensaje difundido la víspera en la red Twitter, el sacerdote y activista Alejandro Solalinde pidió ayudar a este grupo a llegar a la capital.
«Estamos con la cuarta etapa del éxodo migratorio (caravana) 1.800 migrantes, la mayoría salvadoreños: niños, mujeres, familias, adultos mayores, personas discapacitadas. Necesitamos moverlos, de Rodríguez Clara, Veracruz, a la Ciudad de México. Por cada autobús son 18.000 pesos (unos 900 dólares) ¿Pueden apoyarnos?», escribió.
Todas las caravanas presentan mayor o menor grado de fragmentación, de forma que es difícil calcular el número de migrantes centroamericanos que se mueven por territorio mexicano, aunque la mayoría de los cálculos apuntan a que son más de 9.000.