Tegucigalpa – Un aumento de los flujos migratorios durante los últimos tres meses ha provocado escasez de mano de obra en los campos de varios departamentos de Honduras.
-Personas que emigran aun teniendo un empleo revelan un nuevo perfil migratorio en Honduras donde los trabajadores perciben que no ganan lo justo por su trabajo.
Así lo señaló el productor Roberto López, quien lamentó la situación y pidió a los hondureños trabajar para sacar adelante el país.
López es productor del departamento de Olancho, el más vasto del país y altamente productor de granos básicos.
De la misma manera, uno de los departamentos con más origen de flujos migratorios, lo que ha provocado que los campos no cuenten con la suficiente mano de obra para garantizar la producción.
No obstante, esa problemática no es exclusiva de Olancho ya que en varios departamentos se registra poca mano de obra a causa de la migración irregular.
“Desafortunadamente se ha posesionado en la mente de las personas más pobres de nuestro país que la migración es la única alternativa para poder salir adelante”, acotó el director ejecutivo de la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (Fenagh), Guillermo Cerritos.
Aceptó que la migración irregular está afectando la producción en los campos y se debe contrarrestar con la generación de empleos.
Lo anterior colige que miles de hondureños aunque cuentan con una oportunidad laboral en el campo optan por emigrar en busca de mejores condiciones.
“Definitivamente que las familias que han vivido de la mano de obra de sus hijos ya sea en café, hortalizas, granos y ganadería se están viendo muy afectados”, apostilló.
La falta de empleo sigue siendo la principal causa de la emigración irregular que se origina en Honduras, pero cada vez es mayor el flujo migratorio de personas que cuentan con un empleo pero creen que no perciben lo justo por su trabajo.
Según las estadísticas oficiales, entre enero y junio la cifra de retornados a Honduras desde Estados Unidos, México, países de Centroamérica y de Europa fue de 29 mil 746 personas.
Según organismos de derechos humanos y expertos en temas migratorios, el aumento en la deportación de hondureños refleja que cada vez son más las personas que tratan de llegar de manera irregular hacia EEUU en busca de mejores condiciones de vida.
Anualmente, miles de personas, incluyendo menores de edad, procedentes de Honduras intentan emigrar también huyendo de situaciones como la violencia y la pobreza, dos de los principales flagelos que afectan al país centroamericano.