Tegucigalpa – Los migrantes deben ser protegidos por los estados en todo el tiempo y lugar donde se encuentren, señaló el titular del Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh), Roberto Herrera Cáceres.

-La primera dama Ana García de Hernández resaltó que ahora se suma la pandemia dl COVID-19 a los peligros que corren los migrantes en su recorrido.

-Los migrantes, hombres, mujeres y niños, deben recibir protección y respeto a su dignidad, en todo tiempo y lugar donde se encuentren, enfatizó el ombudsman.

Mientras la primera dama Ana García de Hernández destacó que los migrantes no sólo están expuestos a las bandas criminales durante su travesía, sino que ahora enfrentan la amenaza de la pandemia del COVID-19, que pone en riesgos sus vidas.

Las preocupaciones sobre la movilización de los migrantes fueron expuestas en la II Conferencia Internacional de Migración que reunió a inicio de mes de forma virtual a las delegaciones oficiales y primeras damas de Norte, Centro y Suramérica, con el objetivo de dialogar sobre la recuperación socioeconómica y el abordaje migratorio en el marco de la pandemia del COVID-19. También tomaron parte del evento funcionarios de derechos humanos y organismos internacionales vinculados a temas migratorios.

La primera dama Ana García de Hernández destacó que los migrantes no sólo están expuestos a las bandas criminales durante su travesía, si no a la pandemia de COVID.

El comisionado Herrera Cáceres presentó lineamientos para abordar el tema de la migración irregular y que consideró importantes en la medida que contribuya a dimensionar enfoques innovadores funcionales para tratar dignamente el fenómeno de la movilidad humana no formal.

Según el defensor del pueblo, los enfoques deben ser consistentes, en todas las circunstancias, y se resumen en que las causas de la migración forzada se encuentran siempre en el país de origen y es este el que tiene la responsabilidad principal de atenderlos.

Si bien hay responsabilidades compartidas con los países de tránsito, destino y aún de la comunidad mundial de Estados, en cuanto a la atención a los migrantes en el contexto de la movilidad internacional, la responsabilidad principal del país de origen sigue siempre a la persona de los migrantes, hombres, mujeres y niños, quienes deben recibir protección y respeto a su dignidad, en todo tiempo y lugar donde se encuentren, enfatizó el ombudsman.


Cientos de migrantes se encuentran en albergues en la frontera entre México y Estados Unidos a la espera de la resolución de su pedido de asilo.

Refirió que, desde 2014, ha venido promoviendo, un cambio orientado a superar la consideración tradicional de ciertos gobiernos de visualizar la migración irregular como una amenaza a la seguridad del Estado de tránsito o de destino, y a enfocarla, en adelante, como una cuestión de seguridad humana, a ser atendida conforme a lineamientos de desarrollo sostenible.

Recordó que este enfoque fue asumido en la Segunda Cumbre Iberoamericana de Migración y Derechos Humanos, en México, celebrada en 2017, en cuya declaración “se constata la necesidad de una nueva mirada respecto al tema de la migración desde un enfoque de dignidad humana, teniendo presente los vigentes instrumentos y entendimientos universales sobre la seguridad humana y la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que posibilite también atender las causas de los flujos migratorios sin olvidar las responsabilidades compartidas de los Estados de origen, tránsito y destino, así como de la comunidad internacional”.

Añadió que se recomienda a todos los Estados que experimentan fenómenos migratorios, que sean países de origen, tránsito o destino final, que “desarrollen políticas de protección, apoyo y asistencia en los fenómenos migratorios, cumpliendo con los compromisos asumidos en el ámbito de la agenda 2030 de las Naciones Unidas”.


Los migrantes de diferentes países se movilizan por la ruta migratoria en busca del sueño americano.

Además de facilitar la migración y la movilidad ordenada, segura y regular de las personas se debe cumplir con la atención de la situación de pobreza, exclusión social, la desigualdad, la desprotección social, así como de una democratización mayor de la institucionalidad, nacional e internacional, en función de una comprensión y decisiones más cercanas a su compromiso con los pueblos y sus necesidades, puntualizó el responsable del Conadeh.

En el foro, la primera dama de Honduras, Ana García de Hernández, destacó que actualmente la población migrante no sólo se expone a bandas criminales, traficantes de personas y extorsionadores, sino que además se enfrentan a una pandemia que ha cobrado la vida de miles de personas en el mundo.

Aseveró que los fenómenos mundiales de migración requieren de soluciones regionales con enfoques integrales y coherentes que garanticen un desarrollo sostenible y la solución a los desafíos que plantea la migración en todas sus dimensiones.