Tegucigalpa-En plena pandemia del coronavirus, un grupo de más de 70 migrantes que esta mañana salieron en una caravana de Choluteca, sur de Honduras, denunciaron que fueron víctimas de agresiones por parte de la Policía Nacional, pero su versión fue desmentida por un jefe policial, mientras que autoridades de migración dijeron durante el tiempo que llevan en Honduras se les han respetados sus derechos humanos.
-Migración ofrece retorno asistido al éxodo de 255 personas que llegaron desde Haití, países africanos y Cuba.
Según se informó, la caravana la integran personas provenientes de Haití, Cuba y África donde hombres, mujeres y niños fueron víctimas de las bombas lacrimógenas por parte de los agentes policiales a la altura de Pavana.
Se indicó que varios migrantes resultaron con desmayos producto de la inhalación del gas lacrimógeno.
Los migrantes señalaron que ya no tienen dinero y que necesitan salir de Honduras para llegar a México y solicitar asilo político.
Los miembros de la caravana indicaron que ante las protestas de racismo que se registran en Estados Unidos no quieren llegar a ese país, sino quedarse en México donde el trato, según sus testimonios es más humanitario.
“No queremos quedarnos en Honduras, a las autoridades les pedimos apoyo, ya no tenemos dinero, no podemos permanecer en este país”, señalaron los migrantes.
El grupo de migrantes salió a eso de las 6:00 de la mañana rumbo a la capital hondureña para luego dirigirse hacia la frontera con Guatemala.
Versión policial
De su lado el director Nacional de Servicios Policiales Fronterizos, Julián Hernández, dijo que no existió agresión contra los migrantes pero sobre el destino del éxodo, en su ruta hacia el norte del continente.
Indicó que es un tema que «se está gestando con las máximas autoridades», a la luz de los acuerdos migratorios internacionales que este país centroamericano ha suscrito.
Hernández informó que la caravana continúa su ruta y se encamina cerca de San Lorenzo, Valle.
Retorno asistido
De su parte, directora de Migración y Extranjería, Carolina Menjívar, informó que los migrantes en cuestión junto con otras 185 personas se encuentran en Choluteca desde el 6 de marzo, previo que se desatará en Honduras la pandemia de COVID-19 e indicó que desde entonces se le ha asistido bajo condiciones de dignidad.
Agregó que desde entonces hasta la fecha han nacido en Honduras cuatro hijos de miembros de ese grupo de migrantes.
La directora Menjívar recordó que debido a la pandemia no hay un corredor habilitado que permita la ruta hacia los países del norte y agregó que incluso para los ciudadanos de los países que conforman el CA-4 no hay fluidez en el transito debido al estado de excepción.
Indicó que como propuesta se ha ofrecido a las 255 personas que conforman este éxodo el retorno seguro y asistido a sus países de origen.
“Lamentamos la mala decisión que tomo este grupo de migrantes y llamamos a los grupos humanitarios en Choluteca a continuar velando por ellos mientras nosotros también les ofrecemos asistencia”, reafirmó la directora Menjívar.
