Tegucigalpa – Decenas de migrantes en tránsito por Honduras desesperados por la tardanza en la emisión de salvoconductos y un comprobante de la amnistía migratoria terminaron en un zafarrancho este día en Trojes, oriente de Honduras.

Honduras aprobó una amnistía migratoria en agosto y luego su ampliación en diciembre con la que los migrantes irregulares quedan exonerados del pago de una multa de 238 dólares equivalentes a 5 mil 789.66 lempiras.

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Sin embargo, los migrantes deben hacer un procedimiento para adquirir un comprobante en las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM).

Cuando los migrantes exceden los límites de atención diaria los procedimientos deben prolongarse hasta el siguiente día.

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Esta demora colmó la paciencia de los migrantes que hoy terminaron incluso lanzando piedras entre sí.

Danlí y Trojes, al oriente de Honduras, son desde el año pasado epicentro de la migración irregular en el país centroamericano ya que la mayoría de los extranjeros hacen su ingreso desde Nicaragua.

Miles de migrantes irregulares recorren ahora Centroamérica en su camino hacia el norte, en un flujo que no ha parado de crecer este año, por su posición geográfica Honduras es un paso obligado.

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Los migrantes cuentan con el beneficio de  amnistía migratoria y de salvoconducto, con lo que garantizan no ser detenidos y deportados a su paso por la geografía nacional.

El 100 % de los migrantes manifiestan que no es su deseo quedarse en Honduras y que este solo es un país de tránsito en su objetivo de llegar a México y EEUU.

En medio de abusos, más de 178 mil 300 migrantes irregulares transitaron por Honduras

Casi 200 mil migrantes extranjeros transitaron por Honduras durante el 2022, según estadísticas oficiales.

El alto flujo de migrantes irregulares provocó en meses anteriores una crisis migratoria en el departamento de El Paraíso, al oriente de Honduras, por donde hacen su ingreso los migrantes después de abandonar Nicaragua. (RO)