La ministra de Gobernación, Olga Sánchez Cordero en el Palacio Nacional, en Ciudad de México (México). EFE/Sáshenka Gutiérrez/Archivo

México – La secretaria de Gobernación de México, Olga Sánchez Cordero, insistió este jueves en que «la ley no ha cambiado ni va a cambiar» en materia de migración a pesar de las amenazas de Estados Unidos y los necesarios ajustes.

Sánchez Cordero compareció ante el pleno del Senado para analizar los primeros meses del Gobierno del izquierdista Andrés Manuel López Obrador, donde defendió que las políticas migratorias siguen siendo las mismas que al inicio de la actual Administración el 1 de diciembre de 2018.

«A principios de año (2019) dije que al mismo tiempo que mantendríamos y ampliaríamos la tradición hospitalaria de México, era necesario ordenar el ingreso por nuestra frontera sur», y así sigue y seguirá siendo, según informó la política.

Cuando el nuevo Gobierno entró en funciones, aplicó una política de puertas abiertas hacia la migración centroamericana, algo que fue restringiendo por las presiones del Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ante el incremento del flujo migratorio.

En junio, Estados Unidos y México cerraron un acuerdo migratorio que evitó que el primer país impusiera aranceles a todos los productos provenientes del segundo.

A raíz de ello, México envió a las fronteras norte y sur a la Guardia Nacional -un nuevo cuerpo de seguridad formado por policías y militares- y se contrató a más personal migratorio.

El Gobierno de México informó a inicios de septiembre de que a raíz del acuerdo se redujo el flujo migratorio en un 56 %.

«De enero a junio de este año se estima que pasaron por México, para llegar a la frontera norte y cruzar hacia Estados Unidos, más de medio millón de centroamericanos», explicó Sánchez Cordero.

En general, la secretaria consideró que en estos meses de nuevo Gobierno se ha conseguido «cambiar para bien las relaciones entre Gobierno y sociedad» en un contexto en el que «la pluralidad emergió».

También destacó que por primera vez el puesto de secretaria de Gobernación se está desarrollando con «ojos de mujer».

Sobre todo, dijo, por su «compromiso desde que era una joven estudiante universitaria que marchó por las calles de México en 1968», cuando tuvo lugar la masacre estudiantil de Tlatelolco, en la capital del país latinoamericano.

«Mientras haya una mujer violentada, agredida o menospreciada por el solo hecho de ser mujer, el mundo seguirá siendo injusto», sentenció.

Asimismo, recordó que este jueves se cumplen cinco años de la desaparición de los 43 jóvenes estudiantes de Ayotzinapa, caso que está siendo investigado desde cero por el Gobierno de López Obrador.

«Refrendo ante ustedes nuestro compromiso para esclarecer los hechos ocurridos hace cinco años, para que los familiares puedan conocer lo que realmente ocurrió, para que los responsables rindan cuentas y para que nunca más ocurra en nuestra patria otro crimen como ese», explicó Sánchez Cordero.

Recordó que Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno mexicano, presentó este jueves un informe de las actuaciones llevadas a cabo y reiteró el compromiso con las investigaciones.

«La instrucción y compromiso del presidente López Obrador es fortalecer la democracia participativa con los nuevos instrumentos de participación ciudadana», concluyó la secretaria.