Bogotá – Las mujeres afrodescendientes colombianas reivindican su papel en la construcción de la paz y en la gobernanza local de cara al Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente, que se celebra el jueves.
Líderes y activistas afro se reunieron en un foro internacional virtual, ‘Mujeres afropopulares por la gobernanza local y la paz territorial’, como preparación al Día Internacional y para denunciar la situación que millones de mujeres viven en países de toda la región.
Entre otros datos, se comentó que el 87 % de las mujeres víctimas de violencia sexual del conflicto armado son afrocolombianas, según reveló un informe del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) en 2022, cifra «alarmante» que refleja la desigualdad en este tipo de violencia, según denunció Oxfam en un comunicado.
Así, se resaltó la incidencia y la participación que las mujeres afrolatinas tienen en su «autoprotección, autocuidado y cuidado comunitario» desde el liderazgo territorial, con testimonios de mujeres que compartieron su experiencia sobre desafíos a los que se enfrentan y los avances en su reivindicación de la justicia.
Algunas de las amenazas a las que se enfrentan las líderes sociales, además de los asesinatos, disminuyen la participación política de estas mujeres y la pérdida de los avances logrados en términos de derechos debido a la desigualdad de representación de estas comunidades en los espacios de toma de decisiones.
Las mujeres afro, añadió la ONG, se siguen enfrentando a violencia de género, discriminación y racismo, por lo que «es necesario continuar fortaleciendo procesos de gobernanza local» de las mujeres negras como protagonistas en la gestión de ciudades libres de violencias contra mujeres, jóvenes y niñas y para facilitar su desarrollo.
Según reveló un informe del Sistema Integrado de Información de Violencias (SIVIGE) el año pasado, se reportaron 216 casos de violencia física, 124 de violencia sexual, 26 de negligencia y abandono y 13 de violencia psicológica en Buenaventura (Valle del Cauca), localidad de la costa pacífica colombiana en la que predomina la población afrodescendiente.