La directora estadounidense Kathryn Bigelow posa a su llegada al estreno de la película "Zero Dark Thirty". EFE/MICHAEL NELSON/Archivo

Madrid – En contraste con las nominaciones a los Óscar, en las que se vuelve a echar en falta la presencia femenina en apartados como el de dirección, las mujeres alzan la voz en la gran pantalla para tomar las riendas de la acción.

¿Quién dijo que la acción, las aventuras y las historias de superhéroes eran cosa de hombres? Este 2020 será uno de los años más prolíficos en cuanto a presencia femenina en papeles protagonistas tanto delante como detrás de las cámaras, en superproducciones de Hollywood además de en películas más independientes.

No importa la forma ni el lugar, el género de la película o la duración de la misma. Lo que importa es la presencia, el tratamiento de igualdad y la consolidación, en la industria cinematográfica, del papel de la mujer como personaje con la misma valía para contar historias, y protagonizarlas, que sus compañeros masculinos.

Atrás quedaron las mujeres florero de aquellos Westerns en los que, sumisas y sin voz ni voto, esperaban a ser rescatadas por el apuesto, y siempre varonil, caballero.

Un lugar en el que parece haberse quedado anclada la Academia de cine de Hollywood, que sigue en sus trece de olvidarse de nominar a directoras como Greta Gerwig, que es candidata a mejor guion adaptado por «Mujercitas» pero no a mejor dirección, categoría en la que sí estuvo presente en 2018 con «Lady Bird».

Tampoco está nominada Lulu Wang, directora de una de las películas sorpresa de la temporada, «The Farewell».

Sin desmerecer a sus compañeros sí nominados -Martín Scorsese, Todd Phillips, Sam Mendes, Quentin Tarantino y Bong Joon Ho- el dominio masculino en el apartado de dirección en los Óscar es algo totalmente institucionalizado.

Y es que, desde que nacieran los premios Óscar, allá por 1929, es decir, tras 92 ediciones, solo cinco mujeres han aspirado al galardón a Mejor Direccción y solo Kathryn Bigelow se lo ha llevado, en 2010 por «En tierra hostil».

De ahí que ahora, en este 2020, se le esté dando una justa y merecida importancia a la llegada de nuevos largometrajes en los que las mujeres toman las riendas.

En pleno siglo XXI a lo sectores más clasicistas aún les sorprende que haya al menos tres cintas protagonizadas por mujeres en la lista de las más esperadas de 2020, una tendencia al alza.

Este año son Gal Gadot con «Wonder Woman 1984», Scarlett Johansson con «Black Widow» («Viuda negra») y Liu Yifei, acompañada por su directora Niki Caro, con «Mulán», las protagonistas de la acción.

Así pues, el contraataque dirigido a romper las barreras de la desigualdad viene en forma de superheroínas de cómic y renovadas guerreras de Disney. «Mulán» llegará a finales de marzo a la taquilla española mientras que la viuda negra de Johansson y la amazona de Gadot lo harán en abril y junio, respectivamente.

Parece, pues, que DC, Marvel y Disney han dado su brazo a torcer y han visto las posibilidades de abrir la veda en cuanto a continuar la acción de sus sagas o «remakes» a través de sus personajes femeninos.

Algo tendrán que ver, entre otras cosas, las estratosféricas cifras de taquilla y la extraordinaria acogida de la primera parte de «Wonder Woman» (2017), que llegó a los 821 millones de dólares de recaudación.

Los estudios DC dieron cuenta de ello y no sólo apuestan por continuar con la historia de Diana Prince sino que también extienden el mundo de «Escuadrón Suicida» con el spin-off de Harley Quinn («Aves de prensa»), con la irreverente anti-heroína interpretada con gran acierto por Margot Robbie.

Al estreno de la película de Quinn, que ha llegado este viernes a la taquilla española, se une el de la historia de tres mujeres que, alzando la voz, lograron acabar con el depredador sexual de la televisión americana Roger Ailes. Charlize Theron, Nicole Kidman y, nuevamente, Margot Robbie cogen las riendas de «El escándalo (Bombshell)», una historia en la que, esta vez sí, las mujeres tienen mucho que decir.

Tampoco se quedará callada «Harriet», basada en la historia de la abolicionista Harriet Tubman, cuyo coraje, ingenio y tenacidad le permitieron liberar, en el año 1849, a un gran número de esclavos tras haber escapado ella primero de la misma tortura. Su protagonista, Cynthia Erivo, está nominada a mejor actriz y mejor canción en los Óscar.

A todas estas interpretaciones se une la adaptación de la novela homónima de Jane Austen «Emma», escrita y dirigida por mujeres -Autumn de Wilde tras la cámara y Eleanor Catton en el guion-, que llegará a los cines españoles a mediados de abril.

Acción, aventuras, drama, comedia o terror. No importa el género, ni el de las películas ni el de sus protagonistas. Hay historias que deben ser contadas y personajes que merecen su espacio y su reconocimiento dentro y fuera de la gran pantalla, ya sean hombres o mujeres.