Querétaro (México) – María Fernanda Ornelas se sumerge dentro del capó de un automóvil y aprieta tornillos con la experiencia que le ha otorgado formar parte de W Racing Point Garage, uno de los pocos talleres mecánicos de México dirigido y operado solamente por mujeres.

Tras revisar el motor, eleva el vehículo con un gato hidráulico y se recuesta en una pequeña plancha con llantas para colocarse debajo.

Concentrada, estira los brazos y comienza a reparar esta zona del automóvil, un Audi que debe estar listo y entregado en la tarde a su cliente.

Con poco más de 20 años, ella es la ingeniera mecánica encargada de las reparaciones de los carros que llegan a W Racing Point Garage, que se encuentra ubicado en la ciudad de Querétaro, en el centro del país.

En un México donde todavía predomina el machismo y la discriminación, para María Fernanda la creación de este taller es un mensaje para todas esas personas, hombres y mujeres, que desconfían del trabajo que pueda realizar una mujer en mecánica.

“Sí podemos, muchas veces tenemos que aprender mañas y tener herramientas que nos ayuden a ejercer más fuerza o cosas así. Pero sí podemos. Estudiándolo y trabajándolo, cualquiera puede”, dijo este jueves a Efe la joven.

ROMPER PARADIGMAS

Por su mera existencia, este taller, en el que trabajan seis mujeres, ya es un espacio disruptivo que busca acabar con los estereotipos que apuntan a que la mecánica automotriz es un oficio exclusivamente de hombres.

Sonia Luna Chávez es la creadora de W Racing Point Garage. Y según explicó a Efe, trabajó 37 años en el Instituto Politécnico Nacional (IPN).

De estos, durante 12 años estuvo en una unidad de género de la universidad que busca promover la cultura de la igualdad y la formación integral de sus estudiantes y trabajadoras y en donde se reflexionaba sobre las dificultades para las mujeres en un mercado laboral copado por hombres.

Porque, dijo, son cientos las mujeres que estudian ingenierías en México y que terminan abandonando la profesión porque, cuando buscan trabajo, solamente les ofrecen puestos administrativos dentro del gremio automotriz.

Ello a pesar de haber cursado la carrera y contar con el mismo título que sus colegas hombres.

“Me siento muy orgullosa de ser directora porque a seis meses de haber abierto este taller hemos roto paradigmas. La idea es proponer algo diferente, innovar», aseveró Luna Chávez, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

Señaló que, además del taller físico, también se estudió cuántas mujeres se inscriben en cursos de mecánica con el fin de «apoyarlas para darles la oportunidad de que ellas ejerzan la mecánica automotriz”.

Y ante las dificultades de muchas de las estudiantes para hallar trabajo, hoy este taller les permite realizar prácticas y formarlas para el mercado laboral.

“Se acercan a nosotros para que les demos las prácticas porque dicen que en una escuela es mucha teoría, pero ellas sienten que no aprenden lo necesario”, abundó la directora fundadora del taller.

UN ESPACIO DE ENSUEÑO

En este lugar es donde María Fernanda encontró el lugar ideal para poder ejercer la profesión que ama desde niña.

Desde que su padre compraba vehículos antiguos y los reparaba en casa, para ella todo lo relativo a los automóviles se convirtió en una pasión, indicó.

Además de brindar un servicio de calidad, W Racing Point Garage también ofrece cursos gratuitos para mujeres de mecánica básica, los cuales están abiertos a todas las que buscan conocer más su vehículo.

“En este taller se les está enseñando a todas las mujeres de todas las edades a que se empoderen de su auto, que lo conozcan, que sepan cómo cambiar una llanta, cómo checar un nivel de aceite”, concluyó Sonia Luna.