El presidente de la Comisión de Producción, Presupuesto y Economía de la Asamblea Nacional, Wálmaro Gutiérrez, admitió y luego rechazó que se trate de un incremento, durante sus intervenciones ante el plenario. EFE/ Jorge Torres/Archivo

Managua – La mayoría sandinista de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Nicaragua aprobó este miércoles, con trámite de urgencia, la dolarización de los trámites de migración y extranjería, a petición del presidente Daniel Ortega.

Los diputados del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que representan casi el 80 % de los parlamentarios nicaragüenses, aprobaron la petición de Ortega, pese a las críticas de la oposición que consideró la medida como un incremento sistemático de la tarifa, dada la pérdida de valor del córdoba frente al dólar.

El presidente de la Comisión de Producción, Presupuesto y Economía de la Asamblea Nacional, Wálmaro Gutiérrez, admitió y luego rechazó que se trate de un incremento, durante sus intervenciones ante el plenario.

Gutiérrez, primero dijo que «aun con el incremento que se hace estos cobros son mucho menores que los servicios de migración y extranjería en otros países».

Luego señaló que «esta reforma no vine a incrementar a los nicaragüenses en un solo centavo las tasas por servicios migratorios», aunque en la práctica así será.

En la práctica, la dolarización de los trámites migratorios y de extranjería garantiza un incremento mínimo del 3 % anual en el pago por dichos servicios, incluso si son pagados en córdobas, debido al deslizamiento de la moneda nacional frente al dólar.

Recientemente el Gobierno de Nicaragua había anunciado el cobro en dólares por cada prueba de COVID-19, y por la vacuna de fiebre amarilla, de 150 dólares y 30 dólares, respectivamente, para quienes deseen salir del país.

La dolarización se da en medio de una profunda crisis económica, producto del conflicto sociopolítico interno que estalló en abril de 2018, que fue acentuada por la pandemia de la COVID-19.

El Producto Interno Bruto (PIB) de Nicaragua decreció un 3,9 % el año pasado, y 4 % en 2018, como producto de la crisis social y política que afecta al país desde hace dos años, según el Banco Central.

Aunque el Gobierno nicaragüense esperaba que el PIB del país creciera un 0,5 % en 2020, en junio pasado el presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes, admitió que habrá un retroceso de entre el -4,0 % y -4,5 %, como producto de la pandemia.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estimó un -5,9 % para Nicaragua este año.