Tegucigalpa – Tras dos años de pandemia, los niños de Honduras pudieron este sábado volver a festejar en ambientes colectivos, algo que no sucedió en los últimos dos años a causa de la pandemia por la COVID-19.

En ese orden, diversas instituciones educativas y empresas privadas organizaron diversos festejos para los más pequeños de la casa.

A las acciones de celebraciones se unió la Iglesia Católica y Evangélica en las distintas comunidades del país.

Aunque la pandemia no ha terminado, sí ha bajado la curva de contagios, lo que permitió a las autoridades permitir las distintas celebraciones.

Los niños de Honduras no pudieron celebrar su día, el 10 de septiembre, durante los últimos dos años ya que los niveles de la pandemia mantenían una curva con tendencia al alza.

No obstante, aunque este año se registró una nueva ola, en las últimas semanas se ha reportado un descenso de los casos, así como de las hospitalizaciones.

Piñatas, regalos y convivios fueron la mejor forma para festejar a los pequeños que siguen siendo uno de los sectores más vulnerables en el país centroamericano.

Los festejos se extendieron a los distintos parques en las comunidades rurales.

Se prevé que las celebraciones se extiendan durante todo el fin de semana y que el lunes los niños se reincorporen a sus actividades educativas.