Tegucigalpa – El monseñor José Vicente Nácher manifestó en la homilía dominical que la sociedad no debe ceder ante el desánimo de las dificultades de la vida y tener confianza en Jesucristo.
Leyó la historia de Jairo, un personaje en la Biblia, que su historia es conocida por la sanación de su hija a manos de Jesucristo, cuando se creía que estaba muerta.
En ese sentido, Nácher explicó que, frente al derrotismo, Jesús invita a tener fe en que se resolverá los problemas, y que es una gran lección para la sociedad actual.
“Obstáculos siempre los hay, y si no las hay es porque esa tarea no merece la pena o hay algún engaño”, aconsejó el obispo de Tegucigalpa.
El monseñor señaló que, en el mundo actual, hay personas que les gusta infundir el temor, el desánimo y la desconfianza, pero que este no es el camino a seguir del cristiano.
No hay mejor manera que dominar a alguien que esta persona no crea en sí misma y en los demás, eso son los falsos ambientes del miedo e incerteza que algunos les gusta promover, aseveró.
Nácher indicó que la enfermedad y la muerte forman parte de la existencia humana, pero que ninguna tiene cabida sin la existencia del don de la vida.
Muchos siguen considerando el dolor y las limitaciones humanas como una barrera invisible donde no hay rebelión posible, concluyó el monseñor la lectura dominical.