Ciudad de México – Obispos mexicanos y estadounidenses oficiaron el sábado una misa en las inmediaciones del río Bravo por los migrantes fallecidos en la frontera, un acto que se vio interrumpido dos años debido a la pandemia por covid-19.

“Es una misa que cada año hemos realizado binacional es decir, presencia de obispos de ambas partes, fieles de ambas partes. El objetivo es orar, celebrar una eucaristía pidiendo por todos los migrantes, pero sobre todo por los difuntos”, dijo a EFE José Guadalupe Torres Campos, obispo de Ciudad Juárez, quien encabezó la ceremonia.

A la celebración eucarística binacional, acudieron los obispos de Ciudad Juárez, de El Paso; Las Cruces, Nuevo México, Nuevo Casas Grandes y Chihuahua.

La homilía se llevó a cabo en las inmediaciones del Río Bravo, a la cual asistieron decenas de migrantes que portaban banderas de sus países y que se encuentran en México con la esperanza de poder cruzar a Estados Unidos y cumplir su sueño americano.

Jaime Vladimir Guerrero, un migrante de El Salvador, afirmó que esta misa es en honor a sus compatriotas que han fallecido en su intento por llegar a la frontera norte y, aunque se dijo orgulloso de participar en el evento, también aceptó sentirse triste por la dura situación que viven los migrantes.

“Claro, es muy duro, porque a veces no sabes lo que te espera en el camino, más en el desierto, te encuentras con lo peor, ver el cuerpo estirado (muerto) de nuestros compatriotas”, remarcó.