Los Ángeles – El mexicano Omar Chaparro, convertido en un auténtico imán para el público latino, regresa con su característico humor en «No Manches Frida 2», una película que mantiene «la esencia» de la primera parte aunque en un contexto «muy diferente», según dijo el actor a Efe.
Títulos como «Pulling Strings», «How to be a Latin Lover» o la reciente «Overboard» confirman el tirón del intérprete de Chihuahua, de 44 años, que triunfó en 2016 como el protagonista de «No Manches Frida», una de las cintas mexicanas de mayor éxito en los últimos años.
«Con el cine nunca sabes; de repente funciona algo que tú no crees que vaya a funcionar, y fracasa algo que crees que va a ser muy exitoso», reconoció Chaparro, que próximamente rodará «Como caído del cielo», una película sobre el icónico cantante mexicano Pedro Infante.
«En el caso de ‘No Manches Frida’, estábamos cobijados por ser una versión de una película alemana exitosa (‘Fack ju Göhte’). Lo que hicimos fue ‘tropicalizar’ la historia al español y darle la vuelta para armar un guion muy bueno. Y la química entre los personajes tuvo mucho que ver en que funcionara así de bien», comentó el intérprete.
La primera entrega relataba cómo el ladrón Zequi (Chaparro) se hace pasar por un profesor de instituto para recuperar un botín que dejó escondido, sin imaginar que se enamorará de Lucy (Martha Higareda), una de sus nuevas compañeras.
El film ingresó más de 11 millones de dólares en territorio estadounidense.
En la secuela, la pareja está a punto de casarse, pero los nervios del día provocan un desastre total y Lucy cancela la boda, provocando que Zequi haga todo lo posible por convencerla para que regrese con él.
«Ella es una maestra dulce, una mujer tierna que se enamora del chico malo. Y el ‘bad boy’ se enamora de alguien con una personalidad opuesta a la suya. Ahora se cambian las personalidades. Ella era algo ingenua y aquí se empodera. El chico malo ahora es más vulnerable y humano. Me llamó la atención ese cambio», declaró.
En este caso, el equipo de «No Manches Frida 2» decidió ignorar los derroteros de la secuela de la película alemana y optar por una historia original.
«Aunque la secuela alemana fue aún más exitosa que la original, a nosotros no nos gustó y decidimos arriesgarnos a crear algo por nuestra cuenta. La esencia sigue, pero ponemos a los personajes en un contexto muy diferente. Eso es divertido para el público», apuntó.
Al frente de ese equipo se encuentra el director español Nacho G. Velilla, quien ya se encargó de la primera parte, donde demostró que era capaz de captar el humor mexicano y su idiosincrasia.
«Se requiere un talento especial para ello», admitió Chaparro.
«La comedia es muy fina y distinta en cada país. Algo chistoso para un mexicano puede pasar desapercibido para un español y al revés, pero Nacho se ha rodeado de gente inteligente», indicó el actor, quien agradeció al cineasta que le dejase hacer contribuciones al guion.
«Es alguien que realmente sabe escuchar», valoró el actor, quien dijo que su forma de trabajar, con especial énfasis en la improvisación, encajó perfectamente en la planificación que siempre solicita Velilla.
«A Nacho le gustan las cosas claras y planificadas, pero entiende que soy comediante y que mi naturaleza es aportar e improvisar en los ensayos. Allí juego lo más que puedo, y si funciona, lo marcamos. Pero rodando procuro no improvisar», manifestó.
Chaparro estrenará también este año «Pokémon Detective Pikachu», una película que promete arrasar entre los más pequeños.
«Yo encarno a Sebastian, un entrenador pokemon. Tengo una arena de peleas clandestinas y allí pongo a pelear a los pokemon», dijo entre risas.
«No sabía el nivel de fanatismo que rodea a estos personajes hasta que vi el tráiler. Solo salgo en una escena, pero no paro de recibir mensajes y dibujos. Quiero pensar que va a ser algo muy bueno», finalizó.