Roma.- Once personas han perdido la vida en un nuevo naufragio en el Mediterráneo central, tras una operación de búsqueda y rescate de nueve horas por parte del barco Geobarents, de Médicos sin Fronteras (MSF), informó la misma ONG.
«Los equipos de MSF fueron testigos una vez más del resultado de las devastadoras y sangrientas políticas europeas de migración y de la falta de ayuda a las personas» que toman la ruta del Mediterráneo central para llegar a Europa, «y esta vez once personas perdieron la vida», denunció MSF en un comunicado.
Por la tarde, concretó la entidad, el navío Geobarents «recibió una alerta» sobre la existencia de cadáveres en el mar, y «cuando el equipo llegó al lugar se inició un operativo de búsqueda para localizar los cuerpos», hasta hallar a once personas muertas.
Durante esta operación, MSF divisó un barco con otras 20 personas a bordo, a las que sus equipos «lograron rescatar de forma segura».
En relación al caso de los once muertos, la entidad aseguró «no poder determinar el motivo» exacto de la tragedia, pero alertó que «la gente seguirá tomando rutas peligrosas en un intento desesperado por llegar a un lugar seguro».
«Esta catástrofe debe terminar», y «en Europa debemos encontrar caminos seguros y legales» para las personas que cruzan el mar, dijo la ONG.
Según concretó, ahora el Geobarents -que esta mañana también hizo dos rescates- se dirige «hacia el lejano puerto de Génova», en el norte de Italia, el lugar designado para el desembarco por parte de las autoridades italianas, lo que supone «recorrer más de 650 millas náuticas con 165 personas a salvo a bordo».
El barco de la ONG debe hacer esta larga distancia como parte de la política de ‘Puertos lejanos’ que aplica el Gobierno italiano a las ONG de salvamento marítimo, lo que les impide seguir rescatando a migrantes durante días en el Mediterráneo central.
El Gobierno italiano, liderado por la ultraderechista Giorgia Meloni, tiene en el freno de la migración irregular uno de sus principales caballos de batalla, y la contención del flujo migratorio en el Mediterráneo central está entre una de sus prioridades.
En lo que va de 2024, más de 21.700 personas llegaron a Italia a través de esta ruta marítima, una cifra baja en comparación con los más de 53.000 migrantes llegados en este margen de tiempo en 2023. EFE