Ginebra – La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) recordaron hoy «la necesidad de que en toda circunstancia se dé prioridad a la seguridad de los migrantes y refugiados», en referencia a la muerte de 18 subsaharianos en un intento violento de cruce de Marruecos a la ciudad española de Melilla.

Ambas organizaciones de la ONU lamentaron las víctimas registradas en el asalto este viernes de unos 2.000 subsaharianos de la valla que separa Marruecos de Melilla, que además de los fallecidos dejó 322 heridos, entre ellos 189 agentes marroquíes y españoles.

«Estos hechos refuerzan más que nunca la importancia de encontrar soluciones duraderas para las personas desplazadas», señalaron ambas entidades, que instaron a que se consideren vías para una migración segura, ordenada y regular.

Los 2.000 inmigrantes que intentaron cruzar la valla fueron detenidos por un amplio dispositivo organizado por Marruecos, que no pudo evitar que unos 500 subsaharianos llegaran a la valla y forzaran una puerta de acceso, tras lo cual parte de ellos (133 según la Delegación del Gobierno de la ciudad) entraron a Melilla.

El ACNUR y la OIM pidieron a la comunidad internacional ampliar el acceso a alternativas seguras de migración para evitar estos intentos de cruce peligrosos y el riesgo de que este tipo de tragedias se repitan.

Para ello llamaron a que se aplique el principio de la «responsabilidad compartida» en materia de migración.