México – El representante en México del Partido Demócrata de Estados Unidos, Gricha Raether, aseguró este martes que el próximo presidente estadounidense, Joe Biden, pondrá fin a las políticas migratorias «poco humanas» de Donald Trump y predijo un mayor «control» en el tráfico de armas.
«Obviamente Biden va a echar para atrás muchas políticas poco humanas de la actual Administración de manera que no se van a separar familias en la frontera americana», dijo Raether en un foro virtual de la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin).
Aseguró que habrá «suficientes jueces» para desahogar las solicitudes de refugio de los migrantes en la frontera y que ya no se estará «deportando a ciudadanos centroamericanos a México».
Además vaticinó la reactivación del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), una iniciativa de Barack Obama que regulariza a unos 650.000 migrantes que llegaron a Estados Unidos siendo niños y que Trump ha intentado derogar.
El representante de los demócratas esperó que Biden también «corrija» el combate a las drogas, puesto que Estados Unidos, donde más de la mitad de estados han despenalizado la marihuana, «ya entendió que no es un problema de crimen sino de salud pública».
«El que Estados Unidos nos mande más dinero a México para que sigamos peleando esta guerra inútil no debe ser la discusión», dijo Raether, quien recordó que México también está regularizando el consumo lúdico de cannabis.
Para el demócrata, en la medida que se acabe la «guerra contra las drogas», se reducirá el tráfico de armas de Estados Unidos hacia a México y auguró «controles más fuertes» a la industria de las armas por parte de Biden.
Finalmente, el demócrata aseguró que no cambiará «la fuerte relación» comercial consolidada con la puesta en marcha este año del tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
No obstante, Raether advirtió que Biden vigilará que se cumplan cláusulas a las que «Trump no les hubiera dado importancia», como las relativas a los derechos laborales y al medioamebiente.
Biden ganó las elecciones del pasado 3 de noviembre y Trump ya autorizó el inicio de la transición de poderes, aunque sigue alegando sin pruebas que perdió por un fraude electoral.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien ha tenido una buena relación con Trump, es de los pocos mandatarios que sigue sin reconocer la victoria de Biden, junto con los de Rusia y Corea del Norte.
En el foro de la Concamin de este martes, el representante del Partido Republicano en México, Larry Rubin, defendió que todavía no hay un claro ganador de las elecciones y aseguró que el próximo mandatario «tendrá la tarea importante de ganarse a los que no votaron por él».
Asimismo, dijo que es preocupante que Kamala Harris, vicepresidenta electa, votó cuando era senadora en contra del T-MEC.