Cracovia (Polonia). – El vicepresidente del Gobierno polaco, Zbigniew Ziobro, reafirmó este lunes que Varsovia «no aceptará ninguna reubicación forzosa de inmigrantes» impuesta por Bruselas, pues ello convertiría, afirmó, a las ciudades polacas en «zonas de guerra».

En una serie de mensajes publicados en sus redes sociales, Ziobro escribió que su Gobierno no permitirá «que las ciudades polacas se conviertan en zonas de guerra o guetos llenos de grupos agresivos, culturalmente extraños y hostiles» ni que «nuestras madres, esposas e hijas tengan miedo de dejar sus hogares solas».

En sus mensajes, que acompañó de la fotografía del hombre de 45 años herido en un tiroteo en Estocolmo el pasado sábado, el vicepresidente del Gobierno polaco añadió que «si Berlín, París, Bruselas o Estocolmo quieren tener sangre en las calles, es su voluntad», y añadió que «Polonia es y seguirá siendo un lugar seguro».

El llamado pacto migratorio de la Unión Europea (UE) fue acordado la semana pasada con el apoyo de la mayoría de los países miembros y solo Hungría y Polonia votaron en contra, por lo que, de mantener su postura, deberán abonar a un fondo comunitario 20.000 euros por cada persona a la que se nieguen a acoger.

En relación a ello, Ziobro insistió en que Polonia «ha acogido a millones de refugiados ucranianos» y afirmó que su país «puede dar lecciones a Occidente sobre lo que significa ser una nación cristiana que ayuda a otros en situaciones de necesidad».

El primer ministro, Mateusz Morawiecki, reiteró durante un mitin en la pequeña ciudad de Łochów (centro) que mientras su partido esté en el poder «Polonia se mantendrá firme y no permitiremos que inmigrantes ilegales entren en Polonia sin nuestro consentimiento».

«La UE volverá a proponer (la llegada de) estos migrantes, primero decenas de miles, luego cientos, en algunos países ya son millones (…) y en algunas ciudades europeas ya hay distritos enteros en los que los propios vecinos temen entrar», añadió el mandatario polaco.

«Sorry (sic), amigos comisarios. No estamos de acuerdo con su dictado», concluyó Morawiecki. EFE