Washington – Un proyecto de aceleración de aprendizajes a través de tutorías en comunidades vulnerables de Honduras y una iniciativa de emprendimiento para la lucha contra la deforestación de Colombia fueron elegidos este lunes como los ganadores de un concurso organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Las dos iniciativas, que cuentan con financiación del BID, recibieron el premio ‘Superhéroes del Desarrollo’, que se entregó en una ceremonia que tuvo lugar en Washington D.C., donde representantes de ambos proyectos recogieron el trofeo.
El proyecto hondureño es una iniciativa, llevada a cabo por dos entidades del Gobierno central – la Red Solidaria y el Ministerio de Educación -, que surgió como respuesta a los retrocesos educativos, especialmente en las zonas rurales y remotas del país, que provocó la pandemia de la covid-19.
Con estas tutorías, que han llegado a 5.600 alumnos, se pretende que los niños aceleren su proceso de aprendizaje y dejen de tener resultados académicos por debajo de los apropiados, especialmente en español y en matemáticas.
El de Colombia, promovido por la ONG Agricultural Cooperative Development International / Volunteers in Overseas Cooperative Assistance (ACDI/VOCA), busca acabar con la deforestación mediante programas de emprendimiento social y económico.
Según explican sus creadores, entre 2019 y 2022 se deforestaron cerca de 46.000 hectáreas dentro de Sistema de Parques Nacionales Naturales de Colombia, lo que equivale a más de 64.000 campos de fútbol.
Por eso, decidieron crear este proyecto para frenar la expansión de la deforestación, especialmente en zonas donde la economía sumergida tenía una fuerte presencia. La idea ha ayudado a 487 familias que viven en algunos de estos parques y que consiguen preservar el desarrollo rural y a su vez conservar el medio ambiente
Estos dos proyectos ganadores fueron elegidos de una lista de 5 finalistas, donde entraron también programas de Bolivia, Brasil y Guatemala, que un panel de expertos del Grupo BID había seleccionado.
Esta edición de los premios, que era la séptima, registró un récord de iniciativas presentadas, con 149 proyectos.