Tegucigalpa – La recuperación económica de Honduras este año está basada en el buen comportamiento que tendrán los principales socios comerciales del país, en una mejora en la inversión extranjera directa y en el permanente comportamiento positivo de las remesas familiares, de acuerdo con un estudio de la firma consultora especializada Copades.
– Copades estima que el crecimiento del 2021 será de 2.6%, menor a los pronósticos del gobierno que esperan superior al 4%.
– La pandemia, violencia en el proceso electoral y nuevos fenómenos climáticos amenazan el leve crecimiento que se espera.
Pero igualmente en el estudio, dado a conocer por el académico y experto en temas económicos Ramón Medina Luna de la firma Copades, se advierte que los peligros a los que se enfrentará la economía hondureña este 2021 de cara a su recuperación, son un repunte de la pandemia que obligue a reanudar el confinamiento, un proceso electoral incierto, la conflictividad por una potencial interrupción del gobierno, así como nuevos fenómenos climáticos como los ocurridos en noviembre del 2020 con las tormentas tropicales Eta e Iota.
Factores positivos
Según Consultores para el Desarrollo (Copades), una firma hondureña con presencia y reputación regional, el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica una recuperación económica global este 2021 del 5.5%, tras una contracción del -3.5% registrado el año pasado a causa de la pandemia.
Pero a nivel de los principales socios comerciales, la tendencia tuvo diferentes comportamientos, ya que Estados Unidos registró una caída en su economía de 3.4% el 2020 y se espera que este año la recuperación impulse el producto interno bruto (PIB) en 5.1%.
Estados Unidos es el principal socio comercial de Honduras, además de ser la principal fuente del envío de remesas, que se han constituido en la columna vertebral de la economía del país.
Mientras la llamada Zona Euro, que aglutina a los países de la Unión Europea que comparten la moneda común, se proyecta un crecimiento del 4.2% para este 2021, que contrasta con la baja del 7.2 % que se registró el año anterior.
Europa es una de las zonas más castigadas con la pandemia del coronavirus y es la que más retrasada va en la vacunación de sus ciudadanos, crucial para lograr una mejora en la economía de su zona y con ello del mundo.
Mientras China, importante socio comercial ya que de ahí procedan buena parte de las importaciones, tuvo un ligero crecimiento del 2.3% el año de la pandemia (casi negativo para sus estándares del PIB de los últimos 30 años) y este 2021 se proyecta una sólida alza de la economía del 8.3%.
Otro factor externo que favorece la recuperación son las bajas tasas de interés en los mercados internacionales que facilita el acceso al dinero en los mercados internacionales, indicó el especialista Medina Luna durante su exposición del estudio.
La Tasa de Oferta Interbancaria de Londres (Libor, por sus siglas en inglés) se proyecta a 0.2%, una baja respecto al 2020 que fue del 0.7%. Igualmente, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés y que equivale al banco central) mantiene bajas las tasas de 0 a 0.25% y anunció que seguirán hasta que el mercado laboral mejore.
Dentro de los números que Copades señala en su estudio el único factor que provoca disturbio es el precio del petróleo, el cual se estima tendrá un alza del 21.2% este año, aunque el año anterior registró una caída del 32.7%.
Igualmente se destaca la lenta aplicación de la vacuna contra el COVID.
Leve despegue hondureño
Según Copades, el 2021 Honduras registrará un despegue en su economía del 2.6% del PIB, menor a las proyecciones gubernamentales que muestran mayor optimismo. De acuerdo al presupuesto elaborado por la Secretaría de Finanzas (Sefin), el país debería crecer este año entre 4.0-4.5%, mientras el Banco Central de Honduras durante la revisión del programa monetario a mediados del año pasado considera que el crecimiento estará en el rango del 4.5-5.5%.
Pero la firma consultora destaca que las debilidades de la visión oficial están en la alta incertidumbre, la baja productividad y la pandemia.
En todo caso Honduras viene de una caída de su economía el 2020 entre -8% y 9%, señalando que todos los sectores cayeron, excepto el de telecomunicaciones. Los rubros más castigados el año pasado fueron turismo, construcción, agricultura, transporte, comercio e industria.
Para el 2021 estiman que todos los rubros de la economía se recuperarán, excepto minería y construcción, aunque la caída de este último será menor que el año pasado.
Destaca que el PIB nominal fue de 539 mil 438 millones de lempiras el año pasado y estima que el 2021 aumentará a 572 mil 713 millones de lempiras. Las proyecciones gubernamentales, de acuerdo a Sefin, estiman que el producto interno bruto será de más de 689 mil 800 millones de lempiras; lo cual Copades estima como muy optimista.
Caen ingresos fiscales y aumenta deuda
El efecto de la pandemia y las tormentas tropicales Eta e Iota también repercutieron en la sostenibilidad fiscal, ya que los ingresos tuvieron una caída enorme, mientras el gobierno estaba presionado por los gastos para hacer frente al coronavirus, especialmente en el tema médico y el gasto social.
La baja en la recaudación se debió a la parálisis de la actividad económica, ya que el 2019 se captaron 102,954 millones de lempiras, mientras los ingresos cayeron a 83,430 millones de lempiras el 2020. Se estima en casi 25% la baja en los ingresos al tesoro público.
Para el presente 2021 se espera que los ingresos lleguen a 88,613 millones de lempiras.
En el lado del gasto corriente del gobierno, el 2019 el mismo fue de 105,007 millones de lempiras y el 2020 ascendió a 105,366 millones de lempiras, lo que representó una leve alza.
El déficit fiscal se incrementó del 4.7% del 2019 al 7.4% el 2020.
Para el presente año el gasto corriente se estima será de 112,589 millones de lempiras y se espera mantener el déficit fiscal en 7.4%.
La pérdida de ingresos fiscales y el incremento del gasto obligaron al gobierno a endeudarse para cubrir los compromisos que debía enfrentar.
Se estimó la deuda del 2019 en 12,520 millones de dólares y el 2020 se incrementó a 15,640 millones de dólares. Para el presente año se espera que la misma crezca a 17,319 millones de dólares.
Lo anterior eleva la relación deuda/PIB del 59% que estaba el 2019 a 87% para el presente año.
También tiene un efecto en el costo del servicio de la deuda, ya que actualmente el país dedica casi la mitad de sus ingresos tributarios para hacer frente a los compromisos de la deuda pública.
Empleo
Copades considera que una de las más graves consecuencias de la contracción económica generada por el confinamiento al que forzó la pandemia, se encuentra la grave pérdida de empleos remunerados. Se estima que el empleo asalariado cayó un 19%, lo cual representa una caída de casi 300 mil puestos de trabajo. Muchos de estos se fueron a engrosar la línea de los desempleados, que aumentaron en un número de casi 80 mil personas y otros se fueron a ocupaciones en el sector informal de la economía, a trabajar por cuenta propia o trabajo no remunerado en familia. El efecto de esta situación en la estructura ocupacional es que los hondureños tuvieron menores ingresos en 2020; situación que no se prevé será recompensada con el leve crecimiento proyectado para este año de 2021.
Remesas e IED
Se espera que las remesas mantengan su evolución positiva y sigan siendo uno de los pilares de la economía hondureña, apostilló Ramón Medina Luna.
A pesar que el 2020 fue de pandemia, las remesas tras un inicio negativo, al final se recuperaron y terminaron con 5,701 millones de dólares enviados por los inmigrantes, superior a los 5,384.5 millones de dólares recibidos el 2019.
Para este 2021 se estima que las remesas que se enviarán ascenderán a 6,112.1 millones de dólares.
También se espera un comportamiento positivo de la Inversión Extranjera Directa (IED) el presente año, la cual estiman rondará los 435 millones de dólares, cortando un ciclo de datos negativos. El año pasado la misma fue de 329 millones de dólares.